Elección de la Mesa: un indicio y una certeza
Por eso, intentar forzar al Rey a proponerle al Congreso es una grave falta de lealtad, una más, contra el buen funcionamiento del orden constitucional y de sus Instituciones
El indicio apunta a que Pedro Sánchez, superado el referéndum derogatorio del 23J orquestado por la derecha, puede lograr la investidura y formar un nuevo ... Gobierno progresista.
Publicidad
Y la certeza, una de esas certezas negativas que se usan en la interpretación y aplicación jurídicas, es que Feijóo no tiene el respaldo parlamentario para ser presidente del Gobierno.
De esas certezas se derivan, según lo veo, otras: que la única expectativa que pudiera o pudiese tener la derecha para recuperar el Gobierno -que considera que le pertenece a título de herencia- es la de forzar otra convocatoria electoral, comerse con papas a Vox (lo que no va a resultarle tan fácil como con Ciudadanos, porque estos como Milei y otros parafascistas tienen apoyos entre gente humilde asustada y entre clases altas, de las que son una auténtica fuerza de choque) y a ver si así, a la tercera, a la cuarta o a la que sea se calzan el Gobierno.
La otra certeza es que, mientras y hasta tanto no vuelvan a ocupar el Ejecutivo, van a seguir tratando de deslegitimar a cualquier Gobierno progresista. Y no sé si la convivencia democrática podrá aguantar durante mucho tiempo ese estrés protogolpista.
Primero fue negándosela al Gobierno surgido de una moción de censura. Porque a éstos, que lo mismo dan patente constitucionalista a Vox que le niegan hasta el derecho a existir a los partidos legales de carácter independentista, debe habérseles olvidado que la exigencia de responsabilidad política al Gobierno se instrumenta, en nuestro régimen parlamentario, a través de una moción de censura constructiva cuya votación no es formalmente de destitución de un presidente y su gobierno, sino de investidura de un nuevo presidente. Que es lo que identifica al régimen parlamentario racionalizado, que surgió tras la II Guerra Mundial para poner remedio a las debilidades del parlamentarismo clásico, que desembocaba frecuentemente en situaciones de inestabilidad o bloqueo de la acción del Gobierno, sometido al fuego cruzado de fuerzas de oposición, que eran incompatibles entre sí para intentar formar una nueva mayoría parlamentaria. Y esas inestabilidades y bloqueos acabaron llevándose por delante al propio régimen parlamentario y, de paso, a la democracia.
Publicidad
El valor de la votación del jueves consiste en que ha certificado una certeza
Después, es decir en esta última legislatura, trataban a Sánchez de okupa. Y eso que había ganado dos veces las elecciones: en abril y en noviembre de 2019. Pero ahora el argumento era que sus sus aliados lo deslegitimaban: 'golpistas' catalanes y herederos de ETA.
Y, por lo que el propio Feijóo nos ha anunciado, van a continuar con ese raca raca en los próximos tiempos: «Cuando necesitas para gobernar un país tener diputados que su objetivo es debilitar o romper ese país, eso es incompatible con gobernar el país». Así ha solemnizado en el cónclave parlamentario del PP. Peor imposible.
Publicidad
Así las cosas, lo que va a seguir intentando por meras conveniencias tácticas y partidistas es presionar al Rey para que lo proponga como candidato a la investidura -que está cantado que la va a perder- y así poner en marcha el reloj constitucional para la disolución anticipada y la convocatoria de nuevas elecciones.Para el caso de que Pedro Sánchez no lograra ser investido en el plazo de dos meses desde el fracaso cantado de Feijóo.
No les va a importar poner en jaque el prestigio y la autoridad de la Jefatura del Estado, de la Monarquía a la que tanto dicen defender; pero sólo si les baila el agua.
No hay ninguna norma escrita, pero el valor de la votación del jueves consiste en que ha certificado una certeza: la mayoría del Congreso no respalda al PP, ni sólo ni con Vox. Que sólo UPN y la 'progresista' Coalición Canaria clavijista, a la que no le queda otra porque están más uncidos al PP que las yuntas que practican el vernáculo arrastre de ganado en estas tierra canaria, les votarían.
Publicidad
No les va a importar poner en jaque el prestigio y la autoridad de la Jefatura del Estado
Felipe VI apreciará, a la vista de la votación de hoy y en la ronda de consultas con los portavoces y dirigentes de los partidos presentes en el Congreso, que Feijóo tiene cero opciones de ser investido. Por eso, intentar forzar al Rey a proponerle al Congreso es una grave falta de lealtad, una más, contra el buen funcionamiento del orden constitucional y de sus Instituciones.
Y entretanto, haciendo destrozos con Vox contra la igualdad, las políticas de sostenibilidad, la cultura, la progresividad fiscal…a lo largo y ancho de la geografía española, en las numerosas entidades territoriales que han copado 'tirando por el puente' (que diría Ayuso) a quienes han ganado las elecciones.
Regístrate de forma gratuita
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión