Yolanda Graziani: «No me imagino la vida sin la pintura»

La pintura fue su vida. De ahí que hasta que las fuerzas se lo permitieron la artista grancanaria de origen italiano Yolanda Graziani, fallecida este domingo a los 97 años, plasmó sobre el lienzo su universo creativo, marcado por una abstracción lírica que la convirtió en una referencia.

Fue una pionera del arte canario y nacional en pleno franquismo, cuando lo habitual era que desde el propio sector y las instituciones se silenciaran las obras de las féminas. Aunque la propia Yolanda Graziani aclaró en una de sus últimas entrevistas, en mayo de 2021, cuando recibió el Can de las Artes otorgado por el Cabildo de Gran Canaria, que nunca se sintió silenciada. «Pese a que era extraño que a mediados del pasado siglo una mujer se dedicase a la pintura, jamás tuve impedimento para mostrar este arte, sino todo lo contrario. Recuerdo que muchas personas me animaban a seguir adelante, porque había muy pocas mujeres que se dedicaran al arte en Canarias y porque mi trabajo valía mucho y era original», dijo.

Y es que, junto con su legado pictórico y el recuerdo que deja entre todos los que tuvieron la fortuna de conocerla en persona, nada mejor que volver a darle voz a esta artista referencial, a la que se le rindió tributo en la muestra 'Pioneras', en la Casa de Colón, donde se exhibió una selección de obras de Lola Massieu con motivo del centenario de su nacimiento junto a otras de Graziani y de Pino Ojeda.

«No entiendo la vida sin la pintura y no me la imagino sin ella. Fue mi salvación», apuntaba la artista con motivo de estos dos reconocimientos que le llegaron al final de sus días.

Apuntaba que aunque el negro tiene un peso determinante entre sus creaciones, «los colores me volvían loca», dijo quien solo asistió a una clase en la Escuela Luján Pérez. «Aprendí sin libros ni referentes. Desde pequeña ya me encantaba dibujar. Aprendí yo sola. Pintaba lo que se me ocurría», puntualizaba hace tres años.

«Lo mío no se parecía a nada, era muy particular», decía quien logró el Premio de Pintura en la 10ª Regional de Bellas Artes de Las Palmas de Gran Canaria, en 1962, y que un año después protagonizó su primera muestra individual.

Además de la pintura, otra de sus grandes pasiones era la poesía, hasta el punto de que llegó a publicar el volumen titulado 'Sueños de bruma espesa', «con una recopilación de algunos de los poemas que he escrito a lo largo de mi vida», apuntaba.

Los padres de Yolanda Graziani descubrieron Gran Canaria de luna de miel y fue tal su enamoramiento de la isla que decidieron fijar en la misma su residencia. «Él era dentista, procedente de Roma, y ella de Venecia. Tuvieron en total trece hijos, de los cuales dos son artistas, mi hermano Bruno y yo», recordaba.

La enfermedad de sus padres ayudó a apuntalar su pasión creativa durante las noches, reconocía. «Por eso me despertaba a las tres de la madrugada porque era el momento en el que estaba tranquila para poder hacerlo. Y así, amanecía pintando. Pero no era solo por la tranquilidad de la madrugada, sino también porque me gustaba la noche. Me inspiraba mucho», confesaba.

En su casa de Teror guardaba como un tesoro una fotografía muy especial. En la misma aparecía junto a su padre, durante una visita a la casa de Salvador Dalí, en Cadaqués, en 1968. El pintor surrealista catalán quedó fascinado con la artista grancanaria: «La técnica de Yolanda Graziani es prodigiosa y su fantasía te hace ver esos mundos alejados para las personas corrientes, pero que existen, en la luna, en el cosmos, y que es solo dado a ver a los elegidos».

Así recordaba la pintora aquella visita al universal artista: «Me dijo que yo había llegado a la luna antes que el hombre». Y es que no hay que olvidar que la luna fue un elemento esencial dentro de su mundo pictórico, como queda patente, por ejemplo, en su serie 'Paisajes Lunares', que desarrolló entre 1964 y 1970.

A los 95 años, en la entrevista publicada en CANARIAS7 señalaba que «por problemas de salud» ya no podía ejercer su gran pasión. «Ya no pinto. Lo hice hasta hace cinco años atrás y lo echo de menos. Incluso, sigo teniendo ideas nuevas para plasmarlas», puntualizaba con pesar.

La historiadora, comisaria y crítica de arte grancanaria Laura García Morales, especialista en la obra de Yolanda Graziani, ha calificado en varias ocasiones a esta pintora como «uno de los grandes referentes como pionera de la abstracción pictórica de nuestras islas».

Durante su amplia trayectoria artística, Graziani viajó y expuso en países como Alemania, Francia y el resto de España, además de Italia, de donde eran sus padres.

Sus obras figuran en distintas colecciones particulares españolas y de países como Estados Unidos, Suecia, Italia, Suiza, Hispanoamérica, Francia, Inglaterra, Japón. En el archipiélago forma parte de los fondos de instituciones como la Casa de Colón, la Caja de Ahorros de Canarias, varios ayuntamientos y el Gabinete Literario, entre otros.

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