Izaskun Suberbiola, la científica a la que llamaron loca por crear un museo flotante para defender el medio marino
Izaskun Suberbiola lo tiene claro, para ella vivir en armonía con lo que te rodea es esencial, aunque eso suponga romper esquemas
Laura GuillénIzaskun Suberbiola tiene 43 años y viene de una familia ligada al mar donde aprendió que lo esencial es vivir en armonía con lo que te rodea. Recuerda su infancia en las calles y ría de Pasaia, una bahía tradicional vasca protegida por la montaña Jaizquíbel donde sus abuelos se dedicaron a la descarga del bakalao y donde ella aprendió a amar la naturaleza. Le llama la atención que los niños hoy en día no sepan de dónde vienen los peces ni los animales que los alimentan, “parecemos autómatas, nos hemos olvidado de lo ecodependientes que somos”.
Izaskun Suberbiola dirige desde hace 20 años un Museo que es un orgullo en Euskadi y referente en el mundo, porque no es solo un barco museo flotante rehabilitado, va mucho más allá: “Somos una comunidad ecoactiva rumbo hacia una nueva esperanza para construir una forma de vida más en armonía con la naturaleza”.
“Mis hijos me dicen que por qué no seré una madre normal y yo les digo que el mundo cambia si nos atrevemos a ser los raros”
Por este proyecto le llamaron loca cuando comenzó hace dos décadas, “Cuando emprendes un proyecto pionero que no es una réplica, que nace de la pasión y donde rompes los esquemas de la sociedad, te toman como loca, pero creo que es importante tener un sueño y gracias a la constancia y el trabajo, los sueños pueden hacerse realidad”. Hoy, Mater es un referente en el cuidado colaborativo y sostenible del mar en el mundo.
Cuando niños y mayores visitan su barco-museo les recibe con un discurso en proa donde les invita “a ser los raros”. No es una pose porque Izaskun irradia autenticidad sin artificios por los cuatro costados.
El reto de transformar un barco que iba al desguace en un museo
Después de licenciarse en Ciencias del Mar, Izaskun volvió a su tierra dispuesta a poner Pasaia en el mapa. Quería devolverle a ese pequeño pueblo toda la felicidad que su mar y sus calles le habían regalado.
Tuvo la innovadora idea de crear un museo marítimo que fuera además un lugar de referencia en cuanto a cuidado, sostenibilidad, divulgación y trabajo activo en comunidad, “quería crear un museo donde las personas fueran las protagonistas del cambio, no solo espectadores”.
Ser Eco-Smart, una decisión al alcance de todos
En los últimos años ha surgido una tendencia muy fuerte entre los conductores: el deseo de moverse con su coche y reducir a su vez la contaminación hasta el mínimo. Ese sueño, que comparten personas como Izaskun, es cada vez más habitual. Ante ese desafío, muchos modelos incorporan sistemas muy avanzados, como es el caso de las versiones ECO-G GLP de Dacia, que cuentan con una motorización de biocarburación (GLP + Gasolina) que permite hasta un 40% de ahorro en carburante y hasta -11% de emisiones de CO2 (frente a la versión de gasolina). Además, como ventaja adicional, dispone de la etiqueta ECO que permite acceder a las zonas de bajas emisiones de las grandes ciudades.
El nuevo Dacia Sandero tiene una silueta robusta y su parte delantera viene con nuevo diseño
Viene realzada por la firma luminosa en forma de “Y” con luces LED
Presenta un interior con una excelente habitabilidad y comodidad
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Para Izaskun era esencial la autenticidad, por eso necesitaba montar su museo en un lugar singular, que respirara historia, tradición y además vinculado al patrimonio marítimo de Pasaia. “Coincidió que hubo una gran transformación de la flota pesquera vasca, los barcos de madera se estaban hundiendo o los desvencijaban”.
Allí, encontró el último atunero tradicional vasco construido en madera que pudo salvar del desguace y curiosamente se llamaba Mater, que significa madre. Obviamente, conservaron el nombre porque “la mar es de todos y es nuestra madre”, relata la científica.
“Todos somos influencers de nuestro entorno”
Izaskun Suberbiola
Izaskun tiene magia innata y su barco, rehabilitado con mimo y cariño por ella y su equipo, refleja esa portentosa personalidad. Mater mantiene la belleza de lo sencillo y lo útil y aunque ya no navega pescando atunes, lo hace pescando basuras y plásticos, colaborando con la sostenibilidad y respetando la naturaleza, “Mater sigue cuidando el mar a su manera”, asegura la guipuzcoana.
Izaskun recuerda que sus peores momentos de emprendimiento con el proyecto fueron cuando estaba sola. Pronto entendió el valor del equipo y la importancia del cambio en sociedad. “Uno de los principales objetivos de Mater es implicar en el cuidado activo de todos y todas, dejando un legado digno para las siguientes generaciones y por eso trabajar en solitario no tiene sentido, es la riqueza de lo colectivo lo que produce el cambio”, comenta.
Izaskun cree en las personas. Ha motivado con su energía al pueblo entero que se ha volcado en el proyecto para seguir viviendo de lo que siempre ha vivido, la dependencia orgullosa del medio natural. Y además contagia con sus ganas a todos los visitantes de Mater, “la gente está harta de escuchar que todo está fatal y esa esperanza de que también en ti está el cambio y se puede hacer en Comunidad es liberadora”.
La cabeza de Izaskun bulle en cuanto a cuidado del entorno natural se refiere. No entiende la sostenibilidad sin colaboración y lidera actividades que aportan esperanza a todos los visitantes de su museo: “salen dándonos las gracias. Nos dicen que somos necesarios, que somos diferentes y la gente se va con deberes de que tienen que hacer mejoras en su día a día”.
Izaskun se siente una `influencer´ del cambio, una palabra de moda, pero reconvertida según sus valores en una invitación a la esperanza porque, “sin darnos cuenta todos somos influencers de nuestro entorno. Nuestras acciones construyen y dan ejemplo por pequeñas que sean. Se trata de ser influencer para cambiar las reglas”.
Después de 20 años Mater es un museo diferente dentro de su propia idiosincrasia e Izaskun su referente. Aguerrida, segura, y de contagioso pragmatismo no tiene miedo a cumplir sus sueños: “mis hijos me dicen que por qué no seré una madre normal y yo les digo que el mundo cambia si nos atrevemos a ser los raros”.
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Sandero
el
coche
El nuevo Dacia Sandero dispone de un modelo de motorización muy avanzado que forma parte de la oferta ECO-G, que agrupa toda nuestra gama de coches económicos, ecológicos y sencillos de conducir. Este sistema te permitirá ahorrar gracias a un motor GLP (gas licuado del petróleo) acoplado al motor de gasolina de tu Dacia, y todo a un precio competitivo.
urbano
Se trata de un combustible que se fabrica con butano y propano a presión, pasando de estado gaseoso a líquido, ocupando menor volumen y facilitando así su transporte y distribución. Los vehículos de la gama de Dacia que son ECO-G no son híbridos, sino que incluyen bicarburación, es decir, disponen de dos depósitos de carburante separados (GLP y gasolina) y, pueden circular indistintamente con los dos. Ofrece más seguridad, su motor presenta una mayor longevidad y mejora su autonomía.
Créditos
Idea original: Alessandro Marra
Gestión de proyecto: J.M. Sánchez
Diseño UI y Dirección de Arte: Alessandro Marra
Maquetación: Pelayo Trives
Responsable de producción audiovisual: Delia Blesa