El Cabildo busca destapar las «mentiras» sobre el CADI de El Tablero un día antes de la protesta

El Instituto de Atención Social y Sociosanitaria (IAS), que depende del Cabildo, organizó este jueves una visita con medios de comunicación al Centro de Atención a personas con Discapacidad Intelectual (CADI) de El Tablero, en San Bartolomé de Tirajana, para tratar de destapar las «mentiras» y «exageraciones» que se han vertido en las últimas semanas sobre el estado de las instalaciones. La iniciativa se realizó a 24 horas de la protesta convocada frente al Cabildo por las familias de los usuarios de los cuatro CADI de la isla, que se quejan de falta de personal, deficiencias alimentarias graves o recintos deteriorados.

El gerente del IAS, Ricardo Redondas, ejerció de cicerone por el CADI, que incluyó un recorrido por la cocina, por la lavandería y por una de las unidades convivenciales, que llaman 'casitas', en cada una de las cuales se alojan 15 usuarios. «Estas son las condiciones del CADI de El Tablero, un centro moderno, alejado de la imagen que algunos se pueden haber generado tras algunas críticas que, en mi opinión, son desproporcionadas».

Redondas hizo una distinción clara respecto a las quejas por los CADI. «Puede haber críticas justificadas, pero detectamos otras que son exageradas, injustificadas y con claros intereses partidistas». Entre otras, calificó de «falsas» las que aseguran que no hay agua caliente o aire acondicionado. Destacó de este CADI, el más nuevo de los cuatro, que «es un centro a la altura de lo que se espera». Y enfatizó que, aparte de contar con servicios propios de cocina y lavandería, dispone del doble de personal al que obliga la legislación canaria. Según Redondas, con sus 62 residentes y sus 20 usuarios del centro de día, debería tener 41 profesionales y tiene 86 «reales».

Aclara que pese a que la normativa no define perfiles técnicos, el Cabildo implementa programas de calidad en estos centros y ha establecido que deban contar, entre otros, con un director, un médico, personal de enfermería, un trabajador social, un psicólogo o trabajadores de integración social. Sí reconoce que en este CADI estuvieron sin médico «desde septiembre» de 2024, pero advierte de que ya se incorporó una doctora en enero. «Solo siguen vacantes el logopeda, que empieza el lunes, y un terapeuta ocupacional».

Redondas probó incluso dos de los platos del menú de este jueves para demostrar que en el CADI se come bien y saludable. «En este centro hay 11 tipos de dietas, que elabora un nutricionista y que luego avalan los técnicos del IAS, que, además, las prueban». Es tan personalizado, apuntó, que en otro de los CADI hay una dieta que se hace exclusiva para un solo usuario.

Pese a todo, el gerente, que hizo la visita acompañado del exalcalde de Guía, Pedro Rodríguez, con plaza en el IAS como técnico de la Unidad de Calidad de esta entidad, sí reconoció que el instituto no está contento con cómo está gestionando los centros Grupo 5 y ratificó que no se le renovará el contrato en abril.

Sí admitió que hay que mejorar la comunicación con las familias de los usuarios, con quienes dijo compartir la petición de que se suban los salarios de los trabajadores sociosanitarios, «por dignificar la profesión y porque así nos hacemos más atractivos como servicio», pero recordó que no son el Cabildo ni el IAS los que fijan las nóminas, sino el convenio colectivo.

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