Afronta 10 años de prisión por abusar de una menor e incitarla a irse de casa

Un hombre será juzgado la próxima semana acusado de un delito de abusos sexuales sobre una menor con la que mantuvo relaciones sexuales frecuentes pese a ser consciente de su edad y a la que incitó a marcharse de su casa e incluso a delinquir.

El procesado, que se enfrenta a una posible pena de diez años de prisión, será juzgado la próxima semana en la sección sexta de la Audiencia de Santa Cruz de Tenerife.

El escrito de calificación de la Fiscalía recoge que el acusado conoció a la menor en las fiestas de Tejina, a los cinco días coincidieron en una acampada y a partir de ahí mantuvieron contacto a través de una red social hasta que finalmente iniciaron una relación sentimental.

Durante la cual el encausado, «a pesar de que tenía pleno conocimiento de la corta edad de la menor», mantuvo relaciones plenas con ella «casi a diario» hasta que rompieron cuando la chica conoció a otro joven.

Mientras estuvieron juntos, abunda el escrito de la Fiscalía, se produjo un cambio en el comportamiento de la menor. Se fugaba habitualmente del domicilio familiar incitada por el acusado, que le pedía que se fuera a vivir con él, o bien, la inducía a la comisión de hechos delictivos. La chica llegó a abandonar momentáneamente los estudios, por lo que tuvo que repetir curso (tercero de la ESO); y en casa hacía «caso omiso a todas y cada una de sus indicaciones o normas de convivencia en el hogar». En algunas ocasiones fue necesaria la intervención de la Policía para que la menor​​​​​​​ regresara al domicilio familiar.

Sin embargo, a la semana siguiente de ser reintegrada a la vivienda de su padre se volvía a fugar para regresar junto al procesado, con quien discutía habitualmente, lo que era motivo de queja de los vecinos, que llamaban a la Policía y de nuevo era devuelta a su casa.

En una de esos episodios, la menor llamó a su padre para que la fuese a recoger a la estación de guaguas de La Laguna y al ver que no acudía llamó a la Policía ante la sospecha de que pudiera estar en una casa abandonada en compañía del acusado. Allí fue localizada por agentes de la Policía Local en lo alto de un palomar junto a otros menores.

La chica ingresó en un piso tutelado debido a las constantes fugas que protagonizaba. Además, sigue tratamiento en una unidad de salud mental.

A raíz de todos estos episodios, la perito psicóloga forense que la reconoció concluye que la menor presenta una vulnerabilidad psicológica que disminuye su capacidad para la toma de decisiones, una valoración objetiva para la toma de las consecuencias a corto y largo plazo y una identidad que todavía no está plenamente consolidada.

Y detecta factores de riesgo de vulnerabilidad en derivados de la dependencia emocional, minimización, negación y autoinculpación, elevando así la probabilidad de ser víctima de actitudes y verbalizaciones hostiles en su relación de pareja con el acusado.

La conclusión de la psicóloga forense es que la menor carece de «la madurez suficiente para afrontar plenamente los retos de la vida adulta« y que no es capaz de asumir completamente sus actos y sus decisiones.

Además de los diez años de cárcel, la Fiscalía pide una orden de alejamiento por un tiempo de ocho años e indemnizar al representante legal de la menor en la cantidad de 8.000 euros por daños morales.

Temas

• Psicología
• Policía
• Abusos a menores
• Santa Cruz de Tenerife
• Santa Cruz de Tenerife (Provincia)
• Redes sociales
• Juzgados
• Fiscalía