Víctor de Alejandro Suárez, culpable de asesinato en el crimen de La Higuera Canaria

Tras la confesión de los hechos que llevó a cabo Víctor de Alejandro Suárez diez días después de haber quitado la vida a Mónica Garrido, la discusión jurídica en este procedimiento recaía en si había sido un homicidio –como así consideraban fiscalía y defensa– o un asesinato –como defendían las acusaciones particulares–. Además de esta importante circunstancia, también intentaron las partes acreditar o no las agravantes y atenuantes que consideraron en sus informes durante las ocho sesiones de vista oral ante el tribunal del jurado, hechos que modificarían sustancialmente la posterior sentencia.

Pues por el veredicto emitido ayer por el jurado popular, se desprende que los hechos cometidos por Víctor de Alejandro Suárez son constitutivos de un delito de asesinato al incurrir la circunstancia del ensañamiento, con la agravante de parentesco ya que consideraron probado por unanimidad que ambos habían sido pareja sentimental, pero ya la misma cesó antes de los hechos. El jurado dictaminó que el autor del ataque estaba celoso y obsesionado con la víctima y por eso cometió este atroz crimen. También tuvo claro por unanimidad el jurado que el procesado confesó y colaboró con la investigación, apoyando así la tesis de su abogada defensora Mercedes Medina.

Ahora tendrá que ser la magistrada Pilar Verástegui la que dicte sentencia e imponga la condena ajustada al veredicto.