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Hospitales San Roque, oncología de vanguardia

Hospitales San Roque, oncología de vanguardia

La más avanzada tecnología, atención integral y un equipo que destaca por su cualificación humana y profesional son los tres pilares en los que se sustenta el centro sanitario en su estrategia contra el cáncer

Canarias7 / Las Palmas de Gran Canaria

Jueves, 1 de enero 1970

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La Sociedad Española de Oncología Médica estima que en 2035 habrá 315.413 nuevos casos de cáncer en nuestro país. En 2017 los nuevos casos estimados de cáncer en España fueron un total de 228.482. Los tumores más diagnosticados siguen siendo colorrectal, próstata, pulmón, mama, vejiga y estómago. Tecnología de vanguardia, atención integral y un equipo que destaca por su cualificación humana y profesional. En estos tres pilares se sustenta el Servicio de Oncología de Hospitales San Roque Las Palmas, que se ha constituido en paradigma de la nueva medicina.

La estrategia contra el cáncer en Hospitales San Roque se basa en una cuidada coordinación entre los distintos servicios y unidades que abordan esta compleja realidad sanitaria: Diagnóstico por Imagen (Radiología), Medicina Nuclear, Cirugía General, Oncología Médica, Oncoradioterapia, Unidad de Cáncer Hereditario y Consejo Genético, Unidad de Prevención, Diagnóstico y Tratamiento Precoz del Cáncer de Pulmón y Hospital de Día (Quimioterapia).

Tecnología. Uno de los grandes pilares –la mano derecha de la Oncología– es la tecnología, ámbito en el que se han desarrollado enormes progresos y que Hospitales San Roque ha ido incorporando a su circuito oncológico, siendo pionero en la sanidad privada canaria en introducción de la más avanzada tecnología tanto de diagnóstico como de tratamiento.

Hospitales San Roque en Las Palmas de Gran Canaria fue el primer hospital de las islas en contar con un acelerador lineal de última generación, que facilita al paciente oncológico un tratamiento más preciso y menos invasivo, reduciendo exponencialmente las sesiones de exposición a la radiación. El equipo permite realizar tratamientos altamente sofisticados como la Terapia RapidArc, la Terapia de Intensidad Modulada (IMRT) o tratamientos de radiocirugía de lesiones cerebrales y corporales.

Además, Hospitales San Roque también ha sido pionero en la incorporación del mamógrafo digital a su Servicio de Diagnóstico por Imagen. Una estación de trabajo dedicada exclusivamente a la mama que, a través de distintos ordenadores que amplifican la imagen mamográfica para encontrar las microcalcificaciones (en ocasiones, el estado más precoz del cáncer de mama), busca con mayor precisión dónde está la sospecha; y, por supuesto, indaga en los signos precoces de cáncer.

Enfermería oncológica. En su apuesta por dotarse de los mejores profesionales y expertos en Oncología, Hospitales San Roque ha tenido un especial enfoque en el área de enfermería. La profesionalidad y buen hacer de estos expertos sanitarios no se mide sólo por su formación académica, sino por los valores humanos que son capaz de desplegar ante situaciones complicadas para el enfermo y su familia. La enfermería ha evolucionado con el tiempo y, además de las competencias generales y específicas, hoy en día el profesional especializado en Oncología debe pensar más en la persona que en el paciente y promover el desarrollo, adaptación y crecimiento del individuo, desde el momento del diagnóstico hasta la situación terminal.

Esta dedicación tiene su especial función en el Hospital de Día, al que el paciente oncológico acude para sus sesiones de quimioterapia. En él, cuenta para su recuperación con un equipo especializado de enfermería que, además de realizar consultas periódicas de control y evolución según las necesidades de cada paciente, explica en qué consiste el tratamiento y su sintomatología, al tiempo que está en permanente contacto con el resto de profesionales, prestando apoyo emocional durante todo el proceso de la enfermedad y atención las 24 horas del día a través de un teléfono directo y un correo electrónico. De esta manera, se garantiza la tranquilidad del enfermo y la de su entorno.

Medicina nuclear

La Medicina Nuclear es una especialidad médica dedicada principalmente al diagnóstico de pacientes proporcionando una información esencialmente funcional, y además al tratamiento mediante fuentes radiactivas no encapsuladas.

En el campo del diagnóstico, esta especialidad permite detectar alteraciones moleculares dentro del cuerpo humano, y esas alteraciones funcionales preceden siempre a la alteración estructural, por lo que el aporte de la Medicina Nuclear a la Medicina en general es fundamental, muy importante. De hecho, tal y como explica la jefa del Servicio de Medicina Nuclear de Hospitales San Roque, Lili Ramón Valcárcel, «ha venido a cambiar el pronóstico y el enfoque terapéutico de muchas afecciones».

Para desarrollar su labor, la Medicina Nuclear se sirve de isótopos radiactivos, los radioisótopos, elementos radioactivos que emiten energía y señales que es lo permite seguirlos dentro del cuerpo humano. La radioactividad es un fenómeno de la naturaleza que tienen algunos elementos químicos cuya característica es que va desapareciendo para convertirse en otra cosa. Cada elemento tiene un tiempo de desintegración. En ese proceso que experimenta emite la energía.

En el campo del diagnóstico y en el ámbito de la Medicina Nuclear, destaca el PET-TAC, un híbrido entre dos técnicas de imagen (PET: Tomografía por Emisión de Positrones; TAC: Tomografía Axial Computarizada) ofrece la visión metabólica de zonas lesionadas muy pequeñas, esto es, en fase temprana lo que tiene un gran impacto en el diagnóstico. Permite detectar y localizar anatómicamente lesiones cancerígenas en estadíos iniciales, incluso menores a 0,5 centímetros, conocer con mayor precisión la evolución clínica de la enfermedad y planificar el tratamiento con mayores garantías, llegando a modificar el abordaje terapéutico hasta en un 60% de los pacientes.

La medicina nuclear asimismo proporciona procedimientos terapéuticos, tales como la terapia de yodo radioactivo (I-131), que utiliza pequeñas cantidades de material radioactivo para tratar cáncer y otros problemas de salud que afectan la glándula tiroides, como así también otros cánceres y condiciones médicas.

Los pacientes con linfoma No-Hodgkin que no responden a la quimioterapia podrían ser sometidos a una radioinmunoterapia (RIT). Por otra parte, la radioinmunoterapia es un tratamiento personalizado del cáncer que combina la radioterapia con la capacidad de hacer blanco de la inmunoterapia (un tratamiento que imita la actividad celular del sistema inmune del cuerpo).

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