Borrar
Entrada del centro de salud de Canalejas, en la capital grancanaria. COBER
Los colectivos médicos creen que sobran razones para movilizarse por la Atención Primaria canaria

Los colectivos médicos creen que sobran razones para movilizarse por la Atención Primaria canaria

salud pública ·

Advierten de que la mala situación solo se revertirá si mejoran las condiciones para aumentar la tasa de reposición. El problema afecta a toda España

Carmen Delia Aranda

Las Palmas de Gran Canaria

Sábado, 21 de enero 2023, 23:48

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Esperas de 9,7 días de media para una consulta en un centro de salud, cupos de 2.000 personas por médico -cerca del doble de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud- o agendas con 60 consultas en una jornada laboral son varios de los problemas que sufren los médicos de Canarias en algunos centros de salud. No todos, porque la situación es muy desigual, como la distribución de efectivos y recursos.

Distintos colectivos médicos canarios alertan de que el deterioro de la Atención Primaria es altamente preocupante y coinciden en encontrar motivos para protestar como lo están haciendo los médicos de Andalucía, Aragón, Cataluña y Extremadura, Cantabria, Asturias o Madrid.

Además, invitan a la ciudadanía a reivindicar una mejora urgente de la asistencia en el primer nivel sanitario, ya que su mal funcionamiento pone en peligro la salud de la población. «Ya hay estudios que relacionan la esperanza y la calidad de vida con el código postal más que con el código genético», explica Elena Pérez, vocal de Atención Primaria en el Colegio de Médicos de Las Palmas.

«No es lo mismo que te atienda un médico que tiene unos 8/10 minutos para hacerlo, que otro que ya empieza el día agobiado porque no sabe cuántos terminará viendo. Valorar pacientes requiere tiempo. Necesitamos escucharlos, explorarlos, pensar, decidir y actuar», recalca Pérez, que ve tres consecuencias claras de esta saturación: la imposibilidad de prestar una buena atención, el desgaste físico y psicológico de los profesionales y la sobrecarga de los servicios de urgencias.

Unas urgencias hospitalarias y extrahospitalarias que, en opinión del presidente de la Sociedad Canaria de Medicina de Familia y Comunitaria (Socamfyc), Gustavo Moreno, están masificadas, no solo por la demora para acceder a la Atención Primaria, sino por la altas cotas de burocratización de la asistencia, con tareas inducidas por otras instancias sanitarias y no sanitarias.

Demanda sobredimensionada

Además, pide educar a la ciudadanía para que adopte decisiones sobre su salud y no recurra a urgencias por patologías comunes irrelevantes. «En la pandemia la población se acostumbró a recibir instrucciones para todo y se ha vuelto muy dependiente del sistema sanitario», dice Moreno.

En este punto coincide plenamente Juan Cabal, presidente de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) en Canarias. «La población no se ha dotado de medios para defender y la sanidad mantiene un carácter paternalista. No se ha empoderado a los pacientes. Con la universalidad y la gratuidad, la demanda puede ser infinita, pero los medios no lo son», dice Cabal.

Otro aspecto importante es que los servicios y programas han crecido en los últimos años, mientras que el número de médicos se reduce por la baja reposición de quienes se jubilan. A estos factores, según Cabal, hay que sumar el aumento y el envejecimiento poblacional, además del medio millón de turistas mensuales que llega a las islas con su «formulario E-112-ES y que suponen una sobrecarga para el sistema público».

Más grave aún es la falta de pediatras. «En Canarias se estima que el 50% de los pediatras se jubilará en los próximos cinco años», advierte Elena Sánchez, presidenta de la Asociación de Pediatría de Atención Primaria en Canarias (ApAP). Además, actualmente solo el 70% de las plazas de pediatría están ocupadas por pediatras, un porcentaje que disminuirá en los próximos años.

Este otoño-invierno, la demanda pediátrica se ha desbordado y está provocando situaciones «intolerables» en las que se atiende a los niños, más difíciles de valorar por su corta edad, en menos de 8 minutos, subraya Sánchez.

Mucha actividad, poco presupuesto

El presupuesto dedicado a la Atención Primaria está en el origen y la solución al problema asistencial que sufren los centros de salud canarios, según afirman desde los colectivos de médicos del archipiélago.

Según el presidente de la Sociedad Española de Médicos Generales (SEMG) en Canarias, Juan Cabal, el sistema sanitario español es hospitalario-centrista, por lo que la mayoría de los recursos van destinados a la atención especializada y hospitalaria.

Así, aunque la Atención Primaria desarrolla el 80% de la actividad asistencial en el sistema sanitario español, solo recibe el 15% del presupuesto del Gobierno de Canarias para la actividad asistencial en 2023.

«Vamos muy por detrás. Ese presupuesto debería llegar al 20%», comenta Cabal que recuerda que, en 2020, Atención Primaria resolvió 260 millones de consultas frente a 80 millones de la especializada.

De hecho, la Organización Mundial de la Salud recomienda a los gobiernos dedicar el 25% del presupuesto destinado a la sanidad a Atención Primaria, según la vocal de Atención Primaria en el Colegio Oficial de Médicos de Las Palmas y miembro de la Asociación de Médicos de Familia de Canarias (Amapcan), Elena Pérez. «Ninguna comunidad llega al 18%», indica la médica.

Así las cosas, «la Medicina de Familia es la hermana pobre de las especialidades médicas», reconoce Juan Cabal.

Esta falta de recursos se traduce en unas condiciones poco atractivas para que los nuevos médicos opten a estos puestos. «No tiene prestigio. Tiene una peor dotación y el salario es inferior», sostiene Cabal.

En estas condiciones, con un déficit de unidades docentes, los nuevos médicos optan por otras especialidades y, quienes deciden especializarse en Medicina de Familia, se «van a otras comunidades, a los servicios de urgencias hospitalarias o se van del país», afirma Cabal que afirma que del orden de un 35% de la plantilla de Atención Primaria se jubilará en los próximos cinco años.

«Llevamos inmersos en una sanidad hospitalcentrista y médicocentrista desde hace muchos años. Revertir esta tendencia está costando bastante. Los presupuestos no tienen en cuenta el crecimiento poblacional ni el aumento del turismo de larga estancia, normalmente población envejecida, que consumen muchos recursos en las zonas turísticas», explica Pérez.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios