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«Hubo bomberos que tuvieron que comprar sus botas para actuar»

Los bomberos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria insisten en la falta de personal y medios con la que se encuentran cada día en el desempeño de su labor. A su vez, confían en un nuevo escenario de diálogo con el Cabildo y significan que en el último año se están desprendiendo de la «leyenda negra que se les colgó interesadamente».

Jueves, 16 de julio 2020, 15:11

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Los bomberos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria hicieron su particular análisis de los incendios acontecidos en Gran Canaria durante las últimas semanas, en una convocatoria en la que aprovecharon para sacar punta a la realidad de un colectivo que lleva años de disputas laborales con el Cabildo. «Hubo bomberos que tuvieron que ir a tiendas a comprarse las botas para poder intervenir», subraya el portavoz de la Junta de Personal, José María Monzón.

Los representantes de la Junta de Personal del Consorcio de Emergencias utilizaron un tono menos áspero del que se esperaba en la convocatoria. Para empezar, en boca de Monzón expusieron que «la gestión política del incendio fue exquisita».

Los bomberos del Gran Canaria explicaron que estuvieron siempre operativos desde que se activó el nivel 1 y que su misión en este tipo de incidentes se centra en que el rescate de personas y la salvaguarda de las viviendas.

Reivindicaciones.

Monzón leyó un decálogo de peticiones que comenzaba con el deseo de que el área de emergencias estuviera coordinado en una consejería específica del Cabildo y que no estuviera dividido entre Medio Ambiente y Economía, como sucede en la actualidad.

El segundo punto es uno de los que defienden con más énfasis. «Hay que aumentar las plantillas de trabajo. Actualmente hay una lista de reserva de 31 bomberos que están a la espera de ser formados. Tenemos un informe de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria que dice que el Consorcio debe tener ocho parques en pleno rendimiento con una plantilla de unos 270 bomberos. Nunca hemos superado los 200», comentó.

En ese aspecto, consideran capital la apertura del parque radicado en Tejeda que lleva cerrado desde los tiempos de José Miguel Bravo de Laguna con el PP en el Cabildo.

Además, los bomberos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria creen que se debe mejorar la operativa, en un trabajo coordinado que tenga en cuenta a los 19 ayuntamientos que, junto a Cabildo y Gobierno de Canarias, lo integran en una operativa más eficaz junto a los bomberos de los municipios de Las Palmas de Gran Canaria y San Bartolomé de Tirajana.

Monzón incide en que el «Consorcio no está preparado técnicamente y operativamente para afrontar las emergencias de manera ordinaria y mucho menos para los relativos al cambio climático».

En cualquier caso, hablan de un clima de diálogo con el Cabildo propositivo, que ha mejorado en el último año, y que entienden que se retomará cuando todo vuelva a la normalidad en los próximos días. «Después de una emergencia lo ideal es dejar pasar un tiempo», indican.

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