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Músico, investigador, folclorista... Toda la trayectoria de Nino Jiménez se puede explicar como un continuo homenaje a su tierra y una exaltación de canariedad que elevó hasta el máximo exponente gracias a sus deliciosas notas vernáculas con el timple. Este teldense no se ha conformado con convertir en belleza acústica las melodías canarias, sino que, además, ha desarrollado un arduo trabajo por conocer y dar a conocer la música, tradiciones y costumbres de nuestros antepasados llevando a cabo una completa recopilación de campo dedicada a la cultura isleña. Por todo esto, el Ayuntamiento de Telde ha querido rendir homenaje a su figura en las jornadas programadas por la Concejalía de Cultura para celebrar el Día de Canarias.
Este folclorista fue miembro del grupo Mestisay y participó en sus tres primeras producciones discográficas. Especial mención merece su sello en Romances tradicionales El Corredera. «Con Mestisay empezó mi labor de investigación. Éramos unos 20 componentes y constituímos comisiones de trabajo para arreglos musicales y proyectos como Taifa, Sirinoque, Canciones de fiesta o el propio El Corredera», rememora desde su actual residencia en Fuerteventura. De entre sus numerosas charlas, seminarios, certámenes y congresos sobre cultura popular, destaca la ponencia que presentó en 1987 en la Universidad de La Laguna titulada Situación del canto popular en la isla de Gran Canaria.
El sello de Nino empezó a fraguarse con el grupo Guanhaben en La Fraternidad, y tuvo un dilatado recorrido como solista en el dúo Nino y Neli, Rondalla La Pardilla, Grupo Acorayda, Grupo Neigá y El Cerrillal, entre otros. Aunque el gran legado de Jiménez en la ciudad es la escuela municipal de folclore que él mismo promovió hasta su fundación hace 30 años. «Queríamos llevar a todos los municipios de la isla las escuelas de folclore, porque representan lo que hacían nuestros ancestros en cuanto al baile, la música, el deporte autóctono, la gastronomía, los juegos infantiles...», explica este histórico timplista ya retirado que cogió un instrumento por primera vez en la academia teldense de pulso y púa de don Manuel Hernández Galindo en 1973, y tras 47 años de mimo y dedicación a la música y la cultura tradicional, es hoy un icono popular en Telde y en toda Canarias.
El Ayuntamiento de Telde quiso reconocer la aportación que ha realizado Nino Jiménez a la cultura popular incluyendo su imagen en el cartel del Día de Canarias. Un homenaje que llega fruto de su labor en la defensa y difusión de la música canaria. Y es que durante toda su trayectoria profesional, Jiménez se ha destacado como un baluarte de las costumbres y tradiciones isleñas más allá de lo meramente musical.
«Quienes le conocen, saben que decir Nino Jiménez es casi lo mismo que hablar de tradición y costumbres. El sonido de su timple y labor para defender y difundir la música tradicional de las islas le han hecho merecedor de ser el protagonista del cartel de la celebración del Día de Canarias de este año. Y es que Nino es todo un baluarte de la canariedad en Telde», resalta Juan Martel, el edil de Cultura del Consistorio.
Estas jornadas con motivo del Día de Canarias, que llevan celebrándose de manera telemática desde el pasado lunes, tendrán hoy su día grande con un intenso programa de actividades que comenzará a a las 10.00 horas con los vídeos que la población ha ido enviando a Cultura bajo la iniciativa Muestra tu canariedad. Este 30 de mayo, atípico pero muy especial, concluirá a lo grande con un concierto en directo por parte de Besay Pérez, de Los Sabandeños.
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