Medio siglo de vida en el valle

José Sosa, presidente de la Sociedad, cuenta que aunque ahora son alrededor de 300 socios, han llegado a ser cerca de 1.000 abonados. Al final, eso es solo un número, ya que lo verdaderamente importante es el objetivo de entretener y mantener despierto al pequeño pueblo del norte y que «aún le queda para rato», como afirma Sosa.

Para celebrar esta fecha tan importante, Carlos Bello, José Luis Rosales y Loli González organizaron una exposición de fotos antiguas muy singular, muchas de ellas tomadas por Juan Miguel Rodríguez. La muestra la denominaron Exposición interactiva con participación ciudadana. Además de recordar las raíces de la hermandad vecinal, Bello comenta que como él se encargó de recopilar las fotos, pero no conocía a todos los que salían en ellas, dejó que fueran los propios vecinos los que durante la muestra apuntaran en una hoja de papel a las personas que reconocieran en las imágenes, muchas de ellas en blanco y negro.

También han aprovechado la ocasión para organizar una jornadas culturales. En ellas participaron entre otros, Julio Mateo, concejal de Nuevas Tecnologías del Ayuntamiento de Gáldar, y José Manuel Sosa, quien habló sobre los productos más característicos del Valle de Agaete, como son el café o la caña de azúcar. No pudo faltar la fiesta con grupos musicales de Tenerife y Santa Brígida. Así mismo, realizaron un homenaje a 14 socios de la entidad en agradecimiento por su honestidad y apoyo al club social.

Desde su fundador y primer presidente, Antonio González Medina, cuando se cobraban unas 500 pesetas por ser socio, se siguen realizando actividades de todo tipo. Sosa explica que en los años 70 los bailes que allí organizaban eran muy famosos. Recuerda que la pequeña calle que alberga las instalaciones se llenaba por completo, «era un caos», certifica él mismo. «Aún no estaba reformado el local, pero ya venía mucha gente» para danzar al ritmo de una importante orquesta que viajaba desde Tenerife.

Por allí pasaron Fraga, Tonono y Trona del Rosario, entre otros. Personalidades políticas, artistas, deportistas, agrupaciones musicales importantes del archipiélago y los propios socios han sido parte del camino de este local social.

Después de tantos años, es importante la fidelidad de los participantes para su supervivencia, aunque Sosa asegura que han llegado a recibir alguna subvención desde el Cabildo de Gran Canaria, además de mantener un contacto cercano con el Ayuntamiento de Agaete, quienes les ceden actividades durante el año.

Sus instalaciones son una señal del desarrollo durante este último medio siglo. Desde el jardín de la entrada, hasta el techo de plancha que había en el salón inferior en los 80. Todo ha cambiado, aunque guardan las huellas de lo que un día fueron. Fotos de la antigua rondalla y trofeos del Club Deportivo Guayarmina al que sirvieron como salón de trofeos, pero que se fueron por no cumplir con la normativa que pedía la Federación en su campo de La Charca para seguir compitiendo. Son algunos de los recuerdos que siguen conservando, y que a pesar de no seguir perteneciendo a la Sociedad, siguen siendo parte de su historia.

Más celebraciones. La comisión de fiestas del Valle de Agaete se fragua este año entre varios participantes de la Sociedad. Junto al Ayuntamiento del municipio, llevaron a cabo este verano la organización de la preciada fiesta popular de la Rama en honor a San Pedro Apóstol.