Media isla en un atasco
Colas kilométricas, incluso algunas de más de dos horas, en los accesos a la capital. Un accidente provoca que el atasco llegue a Vecindario.
Los Reyes Magos han provocado este viernes un atasco monumental en Las Palmas de Gran Canaria. La cabalgata se ha sumado al trajín de las últimas compras, lo que ha provocado atascos de más de una hora en desplazamientos cortos dentro de la capital.
Las habituales colas en el sureste de Gran Canaria, y concretamente a la altura de Telde, se han agravado en los últimos días por los atascos en los accesos los centros comerciales. En la tarde de este jueves las retenciones afectaron desde Vecindario hasta la entrada de Las Palmas de Gran Canaria en sentido norte. Y, a pocas horas de llegar los Reyes Magos y con los pajes en la calle encargando los últimos regalos, hay que armarse de paciencia en las carreteras. Más cuando un accidente múltiple a la altura del Goro ha agravado la situación a primera hora de la tarde.
A la congestión habitual que sufre la GC-1 tanto en sentido a la capital como en sentido sur, se han sumado las compras navideñas de los últimos días, por lo que hay que armarse de paciencia en los kilométricos atascos que se forman, sobre todo, desde el aeropuerto hasta las zonas comerciales de La Mareta en Telde y los centros comerciales de Las Terrazas y El Mirador.
Es habitual cada tarde en hora punta, aunque también sucede a primera hora de la mañana en horario laboral, que se formen fuertes retenciones en la autopista y que, como se apuntaba hace unos días en este diario, tienen uno de sus puntos negros en el trenzado de la zona comercial de La Mareta en Telde. En las últimas horas, con las compras de los Reyes Magos más rezagados, el tráfico lento ha llegado incluso hasta Vecindario desde la capital.
Parados en el arcén
Incluso algunos conductores, desesperados por las retenciones, optan por parar en el arcén esperando que el atasco se deshaga. Las colas de coches son conocidas por los miles de usuarios que utilizan cada día la GC-1, sobre todo de los que proceden del sur. Pero la época navideña ha agravado el problema desde comienzos de diciembre. El tramo más conflictivo en la GC-1 discurre entre la zona de La Estrella, en la parte alta de La Garita, y el Cruce de Melenara, pero en los últimos días el tramo se ha ampliado hacia el sur.
Tanto agentes de la Policía Local como técnicos de Carreteras sitúan la clave en el trenzado que sirve de entrada y salida de la GC-1 en el tramo paralelo al entramado comercial de La Mareta, donde están radicados Alcampo, Leroy Merlin o Ikea.