La basura se acumula bajo la circunvalación

El debate se ha abierto tras esta publicación, en la que los usuarios de internet critican el funcionamiento del servicio municipal, que no retira escombros (ya que esta es responsabilidad de quien los genera por ley), y el incivismo ciudadano.

Ya en 2018, el ayuntamiento, través de la Policía Local y en colaboración con Limpieza, puso en marcha un dispositivo especial de vigilancia para el control de vertidos y residuos en los espacios urbanos y rurales de la capital. Abandonar residuos no permitidos junto a los contenedores situados en la vía pública lleva aparejada una multa de 120 euros por abandonar trastos, o de 300 euros en el caso de escombros, cuantía que, en caso de reincidencia, se elevaría hasta los 1.800 euros.

Sin embargo, parece que fuera del espacio urbano son muchos los que escapan a los expedientes sancionadores. Por ello, reclaman mayor vigilancia y algunos, incluso, medidas más estrictas como un impuesto de medioambiente.