El plan de salida de La Cícer, antes de otoño

El concejal de Urbanismo, Javier Doreste, explicó que a pesar de que la orden municipal fue dictada en 2016, el Ayuntamiento no podía exigir su aplicación hasta que el Ministerio de Industria diera su aprobación.

«Ninguna estación o subestación eléctrica puede ser cerrada si antes la medida no aparece contemplada en el Plan Energético Nacional», detalló, «lo que hicimos fue ponernos en contacto con la Consejería de Industria del Gobierno de Canarias para lo planteara al Gobierno de España y lo incluyera en el plan de 2018».

La intermediación se produjo hace meses pero no pudo obtener el visto bueno final «por la burocracia» y por el hecho de que «dependía también de que se aprobaran primero los Presupuestos Generales del Estado».

Ahora, con este documento preparado, el concejal de Urbanismo confía en que en las próximas semanas, y en todo caso antes de que llegue otoño, ya esté el requerimiento ultimado, de modo que entonces comience a correr el periodo de dos meses para que Endesa prepare su plan de desalojo.

Para la asociación ciudadana Recuperar La Cícer, el hecho de que el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria no haya reclamado antes el cronograma de cierre paulatino solo demuestra la falta de interés del grupo de gobierno. «El Ayuntamiento debe exigir la redacción del plan sin más excusas ni dilaciones indebidas», demandó el presidente del colectivo, José Juan Navarro.

De hecho, consideran que el documento ya debería estar preparado porque «se trata de ir adelantando y agilizando el trabajo para que cuando llegue el momento, el cierre efectivo de la subestación se haga de la manera más adecuada y ágil».

E insisten en que la redacción del plan de cierre «no conlleva, de momento, ninguna acción fáctica».