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El reciente derrumbe del risco de la playa de El Agujero en Gáldar, con la caída de piedras de gran tonelaje, ha obligado al Ayuntamiento a tomar rápidamente cartas en el asunto. El lugar está acotado y prohibido el tránsito. Mientras tanto, desde el área de Urbanismo de Gáldar, que dirige Heriberto Reyes, se planea la construcción de un muro que evite futuros caídas de piedras.
Afortunadamente, el derrumbe registrado el pasado día 15 solo tuvo consecuencias materiales, ya que se produjo en horas de la madrugada y no alcanzó a personas. En aquel momento, el terreno cedió justo al final de la avenida que conduce a La Guancha, seguramente debido a los efectos de la erosión marina. El desprendimiento produjo daños en la vaya de la avenida, donde cayeron rocas de gran tamaño hacia las escaleras de acceso a la costa, un lugar frecuentemente transitado por bañistas y surfistas hacia el pico de La Guancha. La zona afectada se encuentra alejada de las viviendas, por lo que no se vieron afectadas, ni tampoco el yacimiento arqueológico del Agujero.
Precisamente fueron los vecinos los que dieron aviso del derrumbe al Ayuntamiento de Gáldar, al escuchar el estruendo, según informa el concejal Heriberto Reyes. Tras el suceso, rápidamente «se metió maquinaria, porque era un bloque grande, y se picó para despejar la avenida». Además, explica Reyes, «se picó la avenida para hacer ahora un pequeño muro» que proteja el risco de la avenida. Pero para llevar a cabo esa acción hay que «hay que pedir permiso a Costas porque es primera linea». Hasta que el muro sea una realidad, la zona «está acordonada, los vecinos y pescadores no pueden pasar, aunque hay que tener en cuenta que la medida no interfería el paso a las viviendas».
El Ayuntamiento todavía desconoce el coste de la construcción del muro. En primer lugar, «hemos contactado con una empresa de trabajos verticales y estamos pendientes de su informe y que nos digan si hay gravedad o no y si hay posibilidad de que se vuelva a repetir el fenómeno». En todo caso, «haremos el muro para tener mayor protección».
El concejal de Urbanismo de Gáldar afirma que el derrumbe «no se veía venir, llevaba así toda la vida». Sí es cierto que la asociación de vecinos había presentado escritos por la caída de piedras sueltas, e pequeñas dimensiones, por lo que el Ayuntamiento de Gáldar había llevado a cabo recientemente una inspección y limpieza del lugar. «Pero lo que se cayó fue un bloque grande. Dos semanas antes se había celebrado en el lugar un campeonato deportivo y el Ayuntamiento quitó piedras pequeñas. No había fracturas grandes».
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