El PP pide la Sectorial de Inmigración urgente para que Escrivá explique las derivaciones

En declaraciones a los medios, Blanco insistió en que Castilla y León es una tierra de acogida y solidaria, aunque criticó la falta de información y «deslealtad» del Gobierno central ante la llegada de migrantes a esa comunidad, en referencia a los realojados en Medina del Campo (Valladolid), en un balneario en obras, de los que «no tuvieron aviso» alguno, por lo que no pudieron planificar los recursos que requieren.

La titular de Familia se ha remitido a las declaraciones del pasado del portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, ante la posición del vicepresidente de la comunidad, Juan García-Gallardo (Vox), que habló de «invasión migratoria» y de la llegada de «183 jóvenes varones en edad militar» que generan «tanta sensación de inseguridad». Fernández Carriedo situó esas declaraciones en el ámbito de su partido político, Vox, y en un marco personal, e insistió en que la posición en esa materia la fijan el presidente de la Junta y la consejera de Familia.

Blanco se sumó a la petición de la Comunidad de Madrid para que se convoque esa conferencia, y urgió a que se haga en 48 horas, transcurridas las cuales formalizarán la petición a través de una carta al ministro de Migraciones, José Luis Escrivá.

También el presidente popular, Alberto Núñez Feijóo, se sumó a las críticas por la «descoordinación e improvisación» del Gobierno de España con los inmigrantes que está trasladando desde Canarias, creando «tensión» con los municipios y las comunidades. «Lo mínimo» que debería hacer el Estado sobre este asunto es «sentarse» para abordar estas derivaciones. Acusó a Sánchez de pasar de abrazar a los migrantes del Aquarius a dejarlos en las estaciones.

El ministro de Interior, Fernando Grande Marlaska, acusó tanto a Feijóo como a Ayuso de desconocer el fenómeno migratorio. Apuntó que «el tono y las expresiones carecen de conocimiento real» y acusó al líder del PP de «poco responsable y solidario».

Estas derivaciones han generado en los últimos días críticas y manifestaciones xenófobas por parte del PP y Vox, a las que el PSOE ha respondido con denuncias por posibles delitos de odio. Desde Almería, el coordinador general del PP, Elías Bendodo, ha censurado el «desbordamiento de la inmigración» en el país y ha reclamado al Ejecutivo central que no actúe de forma «unilateral» en los traslados. Y en cascada, los Gobiernos de Andalucía, Madrid o Murcia han acusado al Gobierno de «opacidad» y «descontrol». El vicepresidente de Castilla y León, Juan García-Gallardo (Vox), ha dado un paso más al hablar de «invasión migratoria», vinculando la llegada de extranjeros con la inseguridad ciudadana, mientras que el diputado popular Rafael Hernando acusó a Sánchez de colaborar con las mafias de tráfico de personas.

También en el Parlamento canario, la diputada de Vox Marta Gómez proclamó que «las ayudas a los canarios no llegan, pero mientras tanto a los que vienen de manera ilegal les damos comida, alojamiento y sanidad gratis, a costa del contribuyente».

Por su parte, la presidenta de Cruz Roja en Canarias, Mayte Pociello, no quiso entrar a valorar los comentarios xenófobos de algunos representantes políticos porque «se retratan ellos solos». «A lo mejor si estuvieran más actualizados y fueran más empáticos, esto no les hubiera venido tan de nuevo», manifestó tras entrevistarse con el presidente de Canarias, Fernando Clavijo. Pociello señaló que los recursos de Cruz Roja para atender a migrantes cuando alcanzan la costa de El Hierro son suficientes.

Las Palmas de Gran Canaria. El vicepresidente del Gobierno de Canarias y líder del PP en la islas, Manuel Domínguez, ha pedido a sus compañeros de partido de otras comunidades que acudan a presenciar en El Hierro o Lanzarote en qué condiciones llegan los inmigrantes de las pateras antes de emplear determinadas expresiones. «No puede ser. Si tenemos un poco, solo un poquito de empatía... si alguien viniese a cualquiera de los puertos a ver cómo bajan esas personas de la patera, estoy convencido de que la opinión cambiaría y que ese tipo de reproches deberíamos dejar de hacerlos», dijo el líder.

Domínguez respondió en estos términos al ser preguntado en la cadena SER por declaraciones de cargos públicos del PP en la península que se han referido a los inmigrantes trasladados desde Canarias empleando términos insultantes. El presidente del PP de Canarias no ha dudado en condenar las declaraciones del concejal de Torrox (Málaga) que se preguntó cómo iban a «controlar» a los 200 inmigrantes alojados en un hotel de su municipio «como no les pongan una marca como a los animales o una pulserita», porque consideraba que podían acabar «robando un coche» o propagando «el tifus» en la zona.

El vicepresidente fue tajante: «La inmigración, y así está demostrado, no tiene ningún vínculo directo con la inseguridad» y denunció que «el trato que se le está brindando a los migrantes que vienen huyendo de la guerra y de la hambruna y llegan a nuestra tierra no es el que merecen».