Los inmigrantes, a la espera de un centro para la cuarentena
Los extranjeros que llegaron en patera el domingo, pasaron más de ocho horas en el muelle de Arguineguín hasta que fueron trasladados a los calabozos de la comisaría de la Policía Nacional en Maspalomas. SUP y Jusapol denuncian la falta de previsión de la administración
Hasta media tarde de ayer, los 14 inmigrantes adultos que llegaron el domingo al muelle de Arguineguín -en una patera en la que viajaban también una treintena de menores- seguían en los calabozos de la comisaría de la Policía Nacional en Maspalomas esperando que una ONG se hiciera cargo de ellos. Esta respuesta se complica para las organizaciones que trabajan con la administraciones en la acogida de extranjeros después de la orden emitida por el Ministerio de Sanidad hace una semana que obliga a que todas las personas procedentes de otros países guarden una cuarentena de 14 días a su llegada a España por la crisis sanitaria, lo que requiere mayor espacio y distanciamiento de los inmigrantes que ya se encuentran en acogimiento.
Las organizaciones sindicales de la Policía Nacional SUP y Jusapol han denunciado la «falta de previsión» a la hora de ordenar este confinamiento y de los riesgos añadidos a los que se exponen los agentes que trabajan en estas instalaciones, en este caso la comisaría de Maspalomas. Al respecto, el secretario provincial de Jusapol, César Núñez Medina, denunció que los inmigrantes que llegaron el domingo tuvieron que pasar en el muelle de Arguineguín «más de ocho horas esperando ser trasladados a algún centro, hasta que finalmente se decidió enviarles a la comisaría de Maspalomas sin hacerles ningún tipo de prueba».
También el secretario general del Sindicato Unificado de Policía (SUP) en Canarias, José Luis Guedes, critica esta situación e insiste en que «las dependencias policiales no son el lugar para que estas personas pasen la cuarentena. Ni los 14 ni uno». Es más, agrega, «una vez que se realizan los trámites a su llegada -de identificación y decreto de expulsión-, los inmigrantes no deben que estar en un calabozo. La administración tiene que hacerse cargo de ellos».
El Ministerio de Migraciones se limitó a señalar ayer que las personas que llegan a España «están siendo acogidas, como hasta el momento, en las distintas plazas que ofrece nuestro sistema de acogida». Agregan estas fuentes que «en este momento estamos evaluando nuevas plazas de acogida y las entidades con las que colaboramos han bloqueado más de 600 plazas en todo el territorio español para garantizar el respeto del distanciamiento social en caso de que así fuera necesario».
Ambos sindicatos denuncian además la falta de medidas de protección para los policías que trabajan en esta comisaría «porque es imposible mantener en todo momento la distancia social y porque no cuentan con todos los guantes y mascarillas que precisan». En este sentido, tanto Jusapol como SUP mantienen que los medios de protección no son los adecuados. César Núñez apunta que «muchos agentes no disponen de las medidas de protección personal: ni mascarillas, ni geles» y afirma que «hay policías se están pagando de sus bolsillos los EPI».
También José Luis Guedes hace hincapié en este asunto y resalta que no se les están haciendo las pruebas a los agentes para saber si están contagiados. En su opinión, «lo peor es la falta de previsión, todo esto tenía que estar resulto antes de emitir la orden de cuarentena porque los inmigrantes van a seguir viniendo y algunos de ellos vendrán enfermos».
Por otro lado, los 32 menores que llegaron en una patera el pasado domingo ya se encuentran pasando la obligada cuarentena en el dispositivo de emergencia que la Consejería de Derechos Sociales tiene en el municipio de Telde. Desde el departamento que dirige Noemí Santana, y que es responsable de estos menores, se apunta que estas instalaciones cuentan con espacio suficiente para pasar este periodo de aislamiento y donde se hace el proceso habitual de acogimiento.