Las llegadas de pateras se sitúan por primera vez por debajo de las cifras acumuladas del 2020
Salvamento Marítimo ha rescatado a 470 personas migrantes en el entorno del archipiélago durante las últimas horas, una de ellas fallecida
A falta de menos de dos semanas para concluir el año, los datos parecen aventurar que la llegada de africanos a Canarias no superará la cifra récord de más de 23.000 en 2020. Así, el archipiélago registra 20.752 personas migrantes hasta el 16 de diciembre, un 4,2% menos, según el último balance del Ministerio de Interior.
Es el primer dato negativo en el acumulado con respecto al año anterior, y aunque en este sentido se ha mantenido la tendencia a la baja en los últimos dos meses, lo cierto es que el grueso del repunte se ha concentrado precisamente entre septiembre y noviembre, con cifras por encima de las 3.000 llegadas. En lo que va de diciembre, en cambio, se han registrado 887, el dato más bajo desde la primera quincena de agosto, cuando se contaron 691 personas migrantes.
La explicación reside, por tanto, en el repunte que se experimentó en las islas a partir de octubre y que acumuló el 67% de todas las llegadas de 2020. Si bien durante el último trimestre de este año la afluencia ha incrementado en términos absolutos, suponen la mitad: desde 15.536 en 2020 a 7.634 personas en 2021.
Fuera de las estadísticas están los 470 rescatados por Salvamento Marítimo durante los últimos dos días. A primera hora de ayer el ente estatal interceptó dos pateras con 73 magrebíes al sur de Gran Canaria después de ser avistadas por el avión Sasemar 102. Hasta allí se trasladó, ya por la tarde, otra lancha neumática localizada cerca de Fuerteventura con 60 ocupantes, uno de ellos ya fallecido durante la travesía, mientras que al sur de Gran Canaria encontraban una cuarta embarcación con 34 magrebíes.
Horas antes, durante la jornada del jueves, se habían rescatado otras seis: tres al sur de Gran Canaria con unas 136 personas a bordo, y una de ellas había llegado a última hora de la tarde por sus propios medios a la playa de Arguineguín; dos en Fuerteventura y otra más a El Hierro, que fue interceptada cuando estaba a punto de llegar al puerto de La Estaca. Del total personas migrantes que han llegado durante los últimos dos días se han registrado 27 mujeres y al menos once menores de corta edad.
Presión
Más allá de los números, Canarias sigue enfrentándose a problemas estructurales para afrontar el fenómeno migratorio. Parte de ellos aún reside en las deficiencias de la red de acogida, cuyo epicentro se ha desplazado ahora hasta Lanzarote y Fuerteventura, que requieren espacios mejor acondicionados para que los africanos pasen las cuarentenas obligatorias que exige Sanidad en plena pandemia y en medio de un repunte de los trayectos desde Tarfaya (Marruecos) o El Aiún (Sahara) hasta estas islas. También en Gran Canaria y Tenerife se han señalado la necesidad de mejoras y una mayor supervisión, a pesar de que la situación en los campamentos y los CATE distan mucho de la que se vivió durante el año pasado.
Por otro lado, los recursos de los menores extranjeros no acompañados continúan saturados y con un reparto desigual por comunidades autónomas. De los 9.030 que registra el Ministerio de Derechos Sociales –y que representan el 20% del total de menores acogidos por el Estado– casi la mitad están tutelados por las regiones del sur: Andalucía (2.507), Canarias (421), Ceuta (496) y Melilla (798). También son estas las que concentran el mayor porcentaje de extranjeros en relación al total de los menores tutelados frente a otras como Castilla La Mancha, donde representan el 2,4% (75), Galicia (71) con una cifra similar o La Rioja, que apenas llega al 1,4% (11).