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Un fotograma del último capítulo de la primera temporada.
'Servant': terror doméstico de altos vuelos

'Servant': terror doméstico de altos vuelos

Segunda temporada ·

La serie apadrinada por M. Night Shyamalan regresa con una segunda temporada igual de rica en misterio y terror psicológico

Iker Cortés

Madrid

Martes, 19 de enero 2021

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'Servant', la serie que M. Night Shyamalan apadrinó para Apple TV+, fue una de las gratas sorpresas que trajo consigo la nueva plataforma de vídeo bajo demanda en noviembre de 2019. Exquisitamente rodada, un aroma a clásico envolvía toda la producción, que seguía los pasos de la familia Turner, un matrimonio de clase alta compuesto por Dorothy, reportera en un canal de televisión (Lauren Ambrose, la actriz que daba vida a Claire en 'A dos metros bajo tierra'), y Sean, un chef de éxito (Toby Kebbell). La pareja no pasaba por el mejor momento y contrataba a la joven Leanne (Nell Tiger Free), para echar una mano en el cuidado de Jericho, el pequeño que acaba de nacer.

Creada y escrita por Tony Basgallop, guionista detrás del regreso de '24' a la parrilla televisiva y de títulos como 'Berlin Station', contaba Basgallop a Screenrant que la idea de la serie surgió cuando nació su hija. «Pensé: 'Hay tantas cosas que podrían ir mal ahora...'. Como escritor, cualquier cosa nueva es inspiradora y ese mundo completamente nuevo que se abrió a los treinta y pocos era excitante, me acercaba a los peligros de la paternidad».

Vídeo. El tráiler de la segunda temporada.

En sus primeros compases la ficción ya dejaba claro que aquella enorme y lujosa casa -es un delicioso personaje más de la serie- en la que vivía el matrimonio, situada en un barrio pudiente de Filadelfia, encerraba oscuros secretos que ahondaban en los miedos que rodean a la paternidad, en las crisis de la pareja, la culpa y la responsabilidad, los privilegios y el cinismo de la clase alta y en el desmoronamiento psicológico de los personajes, que parece quedar escenificado en la descomposición literal que sufre Sean, como si de un replanteamiento moderno de 'La mosca' se tratara.

Con unos planos muy cinematográficos y pensados al milímetro, fue el nombre de Shyamalan el que dio renombre a la serie, a pesar de que el cineasta sí, estaba detrás como productor, pero solo firma dos de los diez capítulos que conformaban aquella primera temporada, que contó con otros cinco realizadores detrás de las cámaras. Una primera temporada que trataba de arrojar luz no solo sobre el origen y las motivaciones de Leanne, algo en lo que Sean y su cuñado Julian (Rupert Grint, el popular Ron Weasley de la saga de Harry Potter) vierten gran parte de sus esfuerzos, sino también en cómo se produce la gran tragedia en torno a la que gira toda la producción, casi un spoiler en sí misma.

Su plantel de lujo -están todos fantásticos, en especial Toby Kebbell y la escalofriante Nell Tiger Free- y una estructura narrativa más bien clásica, pero que se permite dar marcha atrás en determinados momentos, sorprendieron tanto a los de Cupertino que, antes siquiera de que 'Servant' se estrenara, anunciaron la puesta en marcha de una segunda temporada, que es la que el pasado viernes llegó a Apple TV+.

El arranque de esta nueva tanda de episodios recupera el ritmo lento al que, antes de que Netflix nos acostumbrara, se iban desvelando las series, a capítulo por semana, tal y como vienen haciendo otras plataformas como HBO y Amazon Prime Video. En este caso es una decisión inteligente, porque los toques de terror y thriller psicológico y el misterio que esconde la ficción de Basgallop es de los que plantean interrogantes en cada episodio, que no siempre encuentran respuesta en el siguiente, y uno debe degustarla sin atiborrarse. Eso sí, el que los capítulos rara vez superen los 35 minutos deja con ganas de más.

Un fotograma de 'Muñeco', el primer capítulo de la segunda temporada.
Un fotograma de 'Muñeco', el primer capítulo de la segunda temporada.

De nuevo se ha optado por varios directores, entre los que están la sueca Isabella Eklöf, el húngaro Nimród Antal y la suiza Lisa Brühlmann. «Ellos son la clave de todo -subraya Shyamalan en una entrevista para El Tiempo-. Los buscamos en distintas partes del mundo, queríamos escuchar voces internacionales. Conseguimos un talentoso equipo para contar la historia y para ofrecer distintos estilos narrativos». La hija del cineasta, Ishana, se ha puesto también esta vez detrás de las cámaras.

'Muñeco', dirigido por la francesa Julia Ducournau, la realizadora de la disfrutable 'Crudo', es el primer capítulo de esta segunda temporada, que comienza con la desaparición de Leanne y el pequeño Jericho. Dorothy elabora una estrategia para tratar de dar con su hijo en las primeras 72 horas porque, como buena periodista, sabe que una vez transcurridas será difícil recuperarlo. Es un pequeño, más bien mínimo, bocado de lo que le espera al espectador en un relato que, como si fuera un círculo vicioso, parece casi volver al inicio de la serie. No hay ruptura, ni gran salto mortal aquí, pero es que 'Servant' nunca ha ido de eso. La pregunta ahora es si sabrá construir otra senda igual de apasionante que la primera. De momento, Apple ya ha anunciado que habrá tercera temporada, pista de que lo que han visto les ha gustado lo suficiente.

La segunda temporada de 'Servant' se ha empezado a emitir en Apple TV+.

Shyamalan, el genio del giro

A M. Night Shyamalan se le ha dado demasiadas veces por muerto, casi tantas como giros de guion tienen sus historias. Su carrera como cineasta despegó con 'El sexto sentido' (1999) y durante unos años fue el niño mimado de Hollywood. De su mente salieron obras tan interesantes como 'El protegido' (2000), una película de superhéroes que no parecía tal, o la más incomprendida 'La joven del agua' (2006), guía básica para hacer una cinta épica a base de diálogo y la piscina de un bloque de viviendas. Sin embargo, la estrella del director indio pareció tocar a su fin tras el estreno de títulos como 'The Last Airbender' (2010) o 'After Earth' (2013). Parecía que Shyamalan no volvería a levantar la cabeza. Sin apenas apoyos, el realizador optó por hacer una película de muy bajo presupuesto, la primera verdaderamente terrorífica, y el público le dio la razón. 'La visita' (2015), la historia de unos niños que van a conocer por vez primera a sus abuelos tras los desencuentros familiares de su madre, volvió a levantar la carrera de un realizador y guionista que nunca ha dejado el género. Luego vendrían 'Múltiple' (2016) -secuela no anunciada de 'El protegido'- y 'Glass' (2019), con la que cerraba la trilogía.

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