Morales ante Clavijo y Torres
En las próximas jornadas puede dar un giro significativo el sistema de partidos en Canarias. A medida que el PSOE se acerque a CC aumentará el apremio de Antonio Morales por distanciarse del PSOE en cuanto que no le dejan otra opción. Y todo a cuenta del sacrificio para ayudar a Santiago Negrín. Es un contrasentido absoluto que en un año el PSOE pase de sufrir la ruptura del pacto y la expulsión de sus consejeros por Fernando Clavijo a mantener acríticamente a Negrín. El trabajo realizado en este tiempo por el PSOE en aras de la regeneración de Radio Televisión Canaria (RTVC) se echa por tierra. Y el éxito lo va a cosechar, de una sentada, Asier Antona.
La situación es delicada, muy delicada. A día de hoy y a esta hora el tablero político apunta movimientos importantes. Vayamos por partes. Que Negrín siga al mando de RTVC, fruto de un sacrificio inexplicable por parte del PSOE, supone una decepción para la izquierda política. Y Morales se verá forzado a reaccionar porque, bajo ningún concepto, le conviene dar la imagen de que su socio en el Cabildo de Gran Canaria está en esos menesteres al alimón del canto de sirena de Clavijo. Morales es una persona de una sola pieza, un hombre de palabra y aspira a consolidar su liderazgo político. No está para bromas. Y Antona, llegado el caso, no tendrá inconveniente (dada la situación de RTVC) en dejar que Morales gobierne en solitario; solo tendría el PP que no prestarse a otras jugadas en el Cabildo. Los números dan y Morales ya lo sabe. Y en esta isla en 2019 se reforzaría más si cabe el escenario electoral donde los réditos los obtendrían NC y el PP. Dos formaciones distintas ideológicamente, que no compiten entre sí y que pueden ganar mucho mutuamente con un pacto de no agresión.
Ángel Víctor Torres aún puede evitar esta situación. Necesita seguir siendo vicepresidente y consejero del Cabildo hasta 2019 para tener alcance mediático y darse a conocer fuera de Gran Canaria. Además, no dispone de escaño que le otorgue protagonismo en el Parlamento. Es decir, lo perdería todo. Y para entenderse con CC habría tiempo, pero siempre después de la cita con las urnas en mayo de 2019. Morales no va a asumir hipotecas colaterales. Y nadie va a entender cómo el PSOE no se suma a la regeneración de RTVC, que hasta hace nada lideró, y que sería desde un posicionamiento plural suscrito por el PP, Podemos y NC. En suma, puede producirse una jugada maestra a favor de Morales que dejaría ya decidida electoralmente Gran Canaria. También NC tendría más consejerías en el Cabildo hasta 2019. Y todo por el estéril empeño de mantener a Negrín.