Borrar
Emmanuel Macron y Marine Le Pen, en la mesa del debate decisivo de las elecciones presidenciales francesas celebrado este miércoles. AFP
Macron acusa a Le Pen de «depender del poder ruso y del señor Putin»

Macron acusa a Le Pen de «depender del poder ruso y del señor Putin»

Los candidatos al Elíseo abordaron temas como la jubilación, la inmigración, el medio ambiente y la actualidad internacional

beatriz juez

Corresponsal. París

Miércoles, 20 de abril 2022

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El presidente saliente, Emmanuel Macron, y la candidata de extrema derecha Marine Le Pen se enfrentaron anoche en un único debate presidencial, tras una extraña campaña electoral eclipsada por la guerra de Ucrania y que no ha apasionado especialmente a los franceses. Dos candidatos, dos visiones de Francia, Europa y el mundo. Un tenso cara a cara de más de dos horas y media de duración a cuatro días de las elecciones.

Tras un firme apretón de manos, los candidatos abordaron ocho temas: desde la pérdida de poder adquisitivo hasta la actualidad internacional, pasando por las jubilaciones, la inmigración, el medio ambiente y la educación. Y dejaron claras las divergencias entre sus dos proyectos para el país. «Seré la presidenta de la libertad, de la soberanía y de la seguridad», y sobre todo, de «la concordia restaurada entre todos los franceses, de la justicia, de la fraternidad nacional y de la paz civil», prometió al inicio del debate Le Pen, que considera que Macron deja un país dividido y crispado tras cinco años en el Palacio del Elíseo. El candidato a la reelección, por su parte, defendió su gestión y planteó los comicios del domingo no solo como la elección del próximo jefe de Estado, sino como «un referéndum por o contra de la UE, por o contra la ambición ecológica, por o contra la laicidad, por o contra lo que somos profundamente».

Los candidatos al Elíseo abordaron temas como la jubilación, la inmigración, el medio ambiente y la actualidad internacional

La guerra ucraniana estuvo muy presente. Le Pen, criticada durante la campaña electoral por haber tenido posiciones prorrusas en el pasado, consideró que «la agresión de la que Ucrania ha sido víctima es inadmisible». La candidata ultraderechista se mostró a favor de las sanciones a Moscú, pero en desacuerdo con el bloqueo de la importación del gas y petróleo rusos porque «no va a tener impacto en Rusia y va a hacer daño al pueblo francés».

«Somos un partido pobre»

El presidente saliente, por su parte, destacó las contradicciones de Marine Le Pen sobre el dossier ucraniano y le echó en cara que fue «una de las primeras a reconocer la anexión de Crimea». En uno de los momentos más tensos del debate, acusó a Le Pen de «depender» de Rusia, ya que su partido pidió un crédito a un banco ruso para la campaña electoral de 2017 que todavía no ha devuelto. «Usted depende del poder ruso y del señor Putin», le dijo Macron, que sostiene que por eso no puede ser presidenta de Francia.

La candidata se defendió con el argumento de que se vio obligada a pedir un préstamo a una entidad rusa «porque ningún banco francés quería darme un crédito» y «somos un partido pobre». «Soy una mujer totalmente libre. Y porque soy una patriota, defiendo Francia y los franceses como lo he hecho toda mi vida», proclamó. Le Pen recordó a su vez que Macron recibió con gran pompa a Vladímir Putin en el Palacio de Versalles y en el fuerte de Brégançon y que abogaba entonces por un acercamiento entre Moscú y Europa.

A diferencia de lo que defendía en 2017, la candidata de extrema derecha aclaró que ahora ya no quiere la salida de Francia de la UE. «Si fuera así lo diría», añadió, y percisó que su deseo es crear «una alianza europea de naciones que respete cada país y cada pueblo». Asimismo, prometió que si es elegida presidenta arreglará «el problema de la inmigración anárquica y masiva», expulsará a los inmigrantes sin papeles y controlará las fronteras nacionales. Le Pen vinculó directamente inmigración e inseguridad ciudadana. Y se mostró a favor de prohibir el velo islámico en el espacio público, a lo que se opone Macron.

No era la primera vez que Macron y Le Pen debatían. Ya lo hicieron en 2017. Entonces perdió Le Pen, agotada tras una intensa campaña y poco preparada frente a un Macron que controlaba bien los dossiers. Anoche buscaba la revancha, y esta vez se defendió bastante bien en un cara a cara que podría hacer inclinar la balanza hacia un lado u otro, ya que muchos votantes todavía están indecisos.

Antes de la emisión, el presiente saliente había aumentado ligeramente su ventaja en los sondeos sobre su rival. Macron sacaba 13 puntos de ventaja a Le Pen en intención de voto: 56,5% frente al 43,5% de la ultraderechista, según el último sondeo de Ipsos-Sopra Steria para FranceInfo y el diario 'Le Parisien'. Hace cinco años, Macron derrotó a Le Pen con el 66,1% de los votos frente al 33,9%.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios