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Jueves, 1 de enero 1970
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El ambiente ayer en la Villa de Moya fue increíble. El pueblo estaba a tope de entusiastas de un deporte que está en auge. La prueba reina de 32 kilómetros resultó emocionante y sorpresiva. Los moyenses Evaristo Almeida y Daniel Santana, junto al gran favorito, Yeray Durán, marcaron el ritmo de la prueba desde el principio.
Durán, ganador del pasado año y actual campeón de la Copa de Canarias de carreras por montaña, controló a sus rivales. Hasta que decidió marcharse. Esto sucedió en el tramo final, pero hubo un desenlace inesperado. En el barranco de Los Propios, en una zona muy rápida, Yeray Durán pasó de largo en una zona en la que tenía que girar a la derecha y perdió la carrera. Evaristo y Daniel llegaron a Los Tilos y conocieron la noticia de que iban delante en carrera. «¿Y qué le pasó a Yeray?», se preguntaron.
Los moyenses decidieron entrar juntos en meta. De la mano, como buenos amigos. El de Carretería y el de El Lance cruzaron la línea con un crono de 3:04.34, en el Paseo Doramas, como grandes protagonistas de una excepcional prueba, que en sólo dos años ha cogido un enorme caché. Por milésimas, Evaristo pisó primero la alfombra de meta, pero ambos quisieron jugarse posteriormente el título a cara o cruz. La fortuna sonrió al corredor de Arista.
A un minuto y 41 segundos llegaba Yeray Durán. El corredor de Arista cruzó la meta con cara de pocos amigos. «La carrera es excepcional, pero debe mejorar la señalización en distintos puntos. A la velocidad que iba por el barranco de Los Propios era imposible ver la marca que habían puesto a la derecha. Seguí de largo. Cuando me dí cuenta no me lo podía creer. Aún así lo dí todo, pero ha sido una pena. Así son las carreras», afirmaba resignado.
A 12 minutos de los ganadores entraban en meta Ángel Ortega, del Guaguas, y Esteban García, del Carucat, cuarto y quinto respectivamente. Hasta las 16.00 horas entraron corredores en meta.
El Ayuntamiento de la Villa de Moya volvió a volcarse con una organización ejemplar. Masajes, zona de estiramiento, servicio de guagua para llevar al corredor al polideportivo a ducharse, comida de confraternidad, juegos infantiles para los más pequeños, etc. Moya vivió ayer un día grande.
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