Rojas: "La única salvación es garantizar los servicios sociales públicos"

Recordó que exclusión social no es lo mismo que pobreza, ya que la segunda es la falta de recursos para desarrollar un plan de vida y la primera la ausencia de habilidad para llevarlo a cabo, y reconoció que la pobreza afecta en las islas a muchas más personas.

Inés Rojas dijo que en Canarias "somos muchos más pobres" que hace cinco años, y recordó que para luchar contra la exclusión social el Gobierno canario tiene diversas medidas, como son la prestación de inserción, las ayudas al alquiler de vivienda, programas de prevención, ayudas a organizaciones, entre otras.

Con esas medidas se busca conformar una sociedad cohesionada y la situación en Canarias es tan complicada que lo único que puede salvarla es garantizar los servicios públicos esenciales, pues si fallan la situación será de descohesión social, agregó la consejera.

Comentó Inés Rojas que en el Reino Unido se habla de privatizar los servicios de policía, algo que su juicio debe hacer saltar las alarmas porque, insistió, si se cuestionan los servicios públicos se cuestiona el estado de derecho y Canarias apuesta por los primeros.

Inés Rojas también dijo que entiende que las comunidades autónomas tienen que cumplir con el déficit pero criticó que Canarias reciba el mismo trato que las regiones que no han cumplido.

La consejera habló asimismo de que los ayuntamientos han atendido a más de 400.000 personas por medio de sus servicios básicos, si bien señaló que para ello se ha utilizado dinero de la prestación de reinserción, cuya finalidad no es esa.

La diputada del grupo Nacionalista Flora Marrero reconoció que Canarias es una de las comunidades que más apoyo dan a las personas en situación de exclusión social, y comentó que el 74,9 por ciento de los hogares de las islas dicen que no tienen posibilidades de ahorro.

La diputada del grupo Popular Milagros Bethencourt criticó que el Gobierno canario presupueste millones de euros de libre disposición o gastos" absurdos" mientras dan la espalda a familias, y que mientras en Canarias hay 600.000 personas al borde la exclusión social el Ejecutivo canario está "con los brazos cruzados".

La consejera dijo que para ella no es difícil la comparecencia, como indicaron varios consejeros, sino el día a día, y reclamó que la voz hay que levantarla donde no se cumple y no ante el Gobierno canario porque recordó que ha sufrido recortes y no pide algo que sea de otras comunidades.

"Nos dan" 800 millones menos "y no cerramos centros" como en otras comunidades autónomas y a pesar del recorte de los fondos de la prestación de reinserción el Gobierno canario mantiene e incluso aumenta el presupuesto, destacó la consejera, quien elogió el trabajo que hacen los cabildos.