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Quesos con sabor a energías limpias

Quesos con sabor a energías limpias

Nicolás Cabrera se encuentra entre los primeros ganaderos de la Isla que utilizan las energías limpias en sus explotaciones. Con placas fotovoltaicas y un molinillo de viento ha conseguido reducir la factura de la electricidad que consumen la ordeñadora y en general todas las máquinas de las que se vale para realizar el trabajo.

Jueves, 1 de enero 1970

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En La Capellanía, a medio camino entre Casillas del Ángel y El Almácigo, se levanta la granja de Nicolás Cabrera Hernández, en la que desde hace un año se gasta mucho menos en gasoil. Hasta entonces, el motor que suministra de electricidad a la explotación se llevaba al menos 600 euros al mes en combustible; esa cantidad se ha visto reducida ahora a 400 euros gracias a la instalación de 12 placas fotovoltaicas y un molinillo de viento que permiten al ganadero generar en torno al 35% de la electricidad mensual que necesita para la luz, la ordeñadora y el resto de máquinas que forman parte de esta granja y quesería majoreras.

La instalación de los sistemas de energías renovables le costó en torno a 23.000 euros, de los que el Cabildo de Fuerteventura le subvencionó 9.000. La cantidad de energía que se genera no es siempre la misma, ya que varía en función de que las condiciones meteorológicas sean más o menos favorables, pero incluso así representa un ahorro importante para el ganadero. Según Nicolás Cabrera, su intención es seguir ampliando el número de placas solares y molinillos de viento para ir progresivamente reduciendo la dependencia de la explotación sobre el recurso fósil. «Si se siguen dando ayudas para poner energías limpias, me gustaría seguir ampliando en un futuro», asegura.

La explotación de Nicolás Cabrera está formada por una cabaña de 500 cabezas de ganado caprino. En los periodos de mayor producción lechera, durante la época de cría de las cabras, se pueden llegar a hacer hasta 100 kilos de queso al día. Para Nicolás Cabrera, la ganadería majorera afronta dos problemas en la actualidad: por un lado, el elevado precio de los piensos, que es una traba para la competitividad de las explotaciones; y, por otro, que «el ganadero vende el kilo de queso a 5,50 euros y luego vas al supermercado y te lo encuentras a 13 o 14 euros, por tanto, al final el que se queda los beneficios es el intermediario», lamenta.

Plan de apoyo a las renovables. El Cabildo ha aprobado el Plan Estratégico de Ahorro Energético y Fomento de Energías Renovables, que incluye cinco tipos de subvenciones:a la electrificación con energías renovables de casas no conectadas a la red; a la instalación de equipos de producción de agua caliente sanitaria con paneles solares; a la producción de energía eléctrica con paneles fotovoltaicos para viviendas conectadas a la red; a la reducción del gasto energético en pymes cuya actividad principal se realice en la Isla; y, por último, a la electrificación con energías renovables de explotaciones ganaderas no conectadas a la red. Para todas estas subvenciones el Cabildo pone 480.000 euros en 2016.

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