Órzola asegura su muelle

Las obras para adecuar a las maniobras marineras en el muelle de Órzola escribieron el lunes pasado una nueva y, al parecer, definitiva página, con la adjudicación de los trabajos por parte de la Consejería de Infraestructuras del Gobierno de Canarias a la UTE formada por Sociedad Anónima Trabajos y Obras (SATO) y Joca Ingeniería y Construcciones S.A. El proyecto deberá ejecutarse en un plazo de tres años, con un presupuesto máximo de 9.028.527 millones de euros. El objetivo de los trabajos es «conseguir unas condiciones de acceso y fondeo seguras, por lo que se ha diseñado un dique externo para atenuar la energía del oleaje incidente, así como el dragado de un canal de acceso con calado permanente suficiente», según fuentes de la Consejería. Asimismo, se incluye la prolongación en 25 metros del muelle, al objeto de aumentar las superficies de explanada y la línea de atraque, permitiendo la estancia de barcos de mayor eslora que los que actualmente pueden amarrar. Así, se consigue «mejorar las condiciones de agitación en la dársena», se explica en el proyecto. Supervisión de Adena. Pero la obra, que sin duda ha sido bien acogida por los usuarios de Haría y de la propia isla de La Graciosa, con quien tiene conexión marítima, también ha despertado los resquemores de la organización ecologista Adena. Su delegado en Canarias, José Trujillo, retoma la vieja reivindicación de la ONG para que «se haga un seguimiento ambiental del modo relleno por el que se ha optado, en lugar de la primitiva manipulación manual con máquinas». Para los ecologistas, «este relleno de vertidos de 400 metros de largo por 8 de ancho puede ser muy peligroso porque se vierte sobre los ecosistemas marinos, en concreto el intermareal». Los responsables de Adena aseguran que vigilarán de cerca que se respete el plan ambiental que se marcó en un principio y con el que estuvieron de acuerdo en su día para dotar de seguridad a la infraestructura. De esta manera «de notarse daños a los ecosistemas se pedirá la paralización inmediata de la obra». Adena ya ha enviado escritos a las administraciones competentes para que se haga el seguimiento del plan ambiental. El alcalde de Haría, José Torres, que ha descrito la obra del muelle de Órzola como «vital» para el municipio, dice no entender las quejas de los ecologistas «ya que se trata de un relleno provisional para poder acceder desde tierra, y que luego será retirado». El alcalde subraya que los trabajos «no amplían nada sino que dotarán de la debida seguridad a esta infraestructura y evitarán que La Graciosa se quede aislada, como ha ocurrido hace quince días». La obra ya cuenta con un dique semisumergido y ahora se alargará el dique de entrada.