Más medios y ninguna respuesta
Marta Ramos
Miércoles, 28 de octubre 2015, 10:05
La búsqueda de los tres militares del SAR desaparecidos sigue sin arrojar respuestas sobre su paradero. Pese a que el Ministerio de Defensa ha reforzado en las últimas horas los despliegues marítimo y aéreo, no se sabe si están en una balsa a la deriva, si se encuentran retenidos o si han fallecido.
Ayer continuó la búsqueda del capitán José Morales, del teniente Saúl López y del sargento Jhonander Ojeda, desaparecidos desde hace seis días después de que el helicóptero Superpuma del Escuadrón 802, que tenía previsto aterrizar en Gando, se precipitase al Atlántico por causas que aún se desconocen. El despliegue marítimo, formado por 20 buceadores y dos robots del buque Olimpic Zeus contratado por Fomento para el sellado del Oleg Naydenov fue reforzado ayer por los cazaminas de la Armada Turia y Segura, con los que se amplía el radio de búsqueda a 24 por 16 kilómetros en el mar. También se incorporó, para sustituir al Camino español, el Buque de Acción Marítima (BAM) Rayo, que servirá de plataforma para los helicópteros. Por aire, y sólo durante las horas de luz, hay permanentemente un avión y un helicóptero que sobrevuelan un área de 400 por 60 kilómetros sobre el océano.
Pese a los refuerzos en el sexto día de búsqueda, los trabajos submarinos y aéreos siguen sin dar resultados sobre la situación de los militares ya que todavía no se ha encontrado ni la cabina de la aeronave, ni, aparentemente, pistas sobre su paradero, por lo que se desconoce si ha habido avances, ya que el Ministerio de Defensa, hasta el momento, sólo ha comunicado los medios que se suman al dispositivo.
El ministro de Defensa, Pedro Morenés, que ha eludido comparecer durante dos días consecutivos ante la prensa, sobrevoló ayer la zona en la que se encuentra el despliegue en un Superpuma del mismo modelo que el siniestrado. Posteriormente se reunió con las familias de los tres militares para informarles del trabajo realizado, pero ningún detalle sobre la búsqueda, que continúa bajo secreto de sumario.
El operativo sigue centrado en localizar la cabina del helicóptero para esclarecer si los tripulantes se encuentran en su interior. Según afirmó Morenés en su última comparecencia, ésta es una tarea «difícil» debido a la turbidez del agua y porque la corriente «pudo arrastrarla», aunque se conoce que se encuentra a 45 metros de profundidad. Además, en colaboración con Marruecos, se controlan todas las embarcaciones por si, como afirmó la Gendarmería marroquí en un primer momento, los tres militares fueron rescatados por un pesquero y están retenidos. Además, el CNI investiga si fueron secuestrados.
Mientras tanto, los familiares se aferran a las informaciones que recogen que el helicóptero amerizó, que se vieron una balsa y bengalas, así como a los testimonios del buque holandés que apuntan que en el interior de la cabina no había nadie.
