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Las consecuencias de la desaparición de Spanair siguen afectando a los bolsillos de los canarios. Los billetes aéreos entre el Archipiélago y la Península se mantienen aún un 10% más caros de media que justo antes de que la compañía catalana decidiera dejar sus aviones en tierra para siempre, hace un mes, y dejara de golpe a Canarias sin un 25% del total de la oferta de plazas con la Península. La subida se dispara, con incrementos por encima del 25%, en aquellas rutas donde la competencia de aerolíneas es limitada y las opciones para el viajero canario, por tanto, se reducen, según fuentes del sector consultadas.
Con todo, los precios tienden a enfriarse, después de que se elevaran como la espuma tras el cese de operaciones de la aerolínea catalana, el pasado 27 de enero, y los billetes se encarecieran en torno a un 25%, y hasta un 40% en determinados vuelos.
Texto íntegro en la edición impresa.También puede adquirir el ejemplar en PDF a través de esta web.
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