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Librerías temáticas

Librerías temáticas

Cayetano Sánchez

Jueves, 1 de enero 1970

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Esto es un tesoro», exclama Mercedes Hernández, estudiante de Historia de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria mientras muestra orgullosa el grueso volumen de Historia moderna de B. Bennassar, entre otros autores, el manual más reconocido de esa época histórica. El calificativo que acuña Mercedes para el ejemplar deriva de que, pese a que es un libro de obligada consulta en sus estudios, en la actualidad está inconcebiblemente descatalogado, pero también por el precio que paga; un solo euro. La escena tiene lugar en El rincón del lector, una librería que une a su condición de libros usados su carácter benéfico, al estar regentada por La Obra Social de Acogida y Desarrollo, en la calle San Marcial de Vegueta. Esta dirección acoge una de las múltiples librerías especializadas de la capital grancanaria, locales a los que parece no afectar tanto los bajos índices de lectura, ni la disminución de ventas en España un 2,4% menos en 2009.

Tal vez el secreto de este éxito relativo de estas librerías radique en que el lector interesado sabe que entre sus estanterías les será más fácil encontrar el volumen deseado en temas concretos: jurídicos, esotéricos, informática, arte, temática canaria, bricolaje o música, entre otras temáticas. En el recorrido de hoy por algunas de ellas volvemos nuestros pasos a la ya citada El rincón del lector donde su encargada, Miriam Aguerre, comenta las características del negocio.

«Nuestros fondos, todos catalogados, se nutren de donaciones de libros usados que ponemos a la venta por precios muy bajos, desde los 40 céntimos hasta los 1.600 que cuesta una Biblia, pero la media pasa poco de un euro por ejemplar. Tenemos todo tipo de libros, principalmente novelas y manuales de texto». Preguntada por sus clientes principales señala que hay «todo tipo de público; desde niños a ancianos, pues saben que aquí van a encontrar libros que ya no están en el mercado, pero también novedades a buen precio. Hay un cliente muy asiduo que siempre nos dice que gracias a nosotros él puede leer; por el precio, claro».

Muy cerca de este lugar, junto al Obispado de la Plaza de Santa Ana, está en la actualidad la Librería Diocesana. Con más de treinta años de historia fue el primer comercio dedicado en exclusiva a la venta de libros religiosos, principalmente de teología, litúrgicos, biblias, novenas o material para catequesis. Desde su apertura Nieves es la encargada de ventas, que comenta quiénes son sus clientes: «Principalmente son miembros del clero, pero también tenemos muchos seglares que se dedican a estudiar cursos de Teología para Animadores de la Comunidad, pues aquí vendemos esos manuales. Por supuesto hay muchos particulares que tienen interés en temas relacionados con el catolicismo que acuden a nosotros».

Canary Books es un referente desde hace décadas para los libros de idiomas, no en vano es la primera librería especializada de las islas en esta materia. «Nuestro mercado principal apunta Gerardo Zerpa, su gerente es principalmente el profesorado de idiomas que encuentra aquí todo el material educativo, tanto en idiomas convencionales como el inglés, francés, alemán, italiano como en otros emergentes, como el chino o el árabe. También es punto obligado de compra para estudiantes de todos los niveles, por las lecturas graduadas, o para niños por cuentos en otros idiomas o juegos didácticos».

Entre los numerosos anaqueles de la librería es posible también encontrar literatura, tanto clásica como más actual, principalmente en los idiomas más extendidos. En estas temáticas cambia el público, según precisa el gerente de Canary Books. «Hay muchos españoles, con nivel de idiomas, que quieren leer en la lengua original en que fueron escritos, principalmente novelas. Pero nuestro público mayoritario en este campo son extranjeros residentes en las Islas, y cada vez nos encontramos con más turistas de cruceros que aprovechan la escala para comprar libros nuevos. Otro tanto sucede con los barcos que recalan en el Muelle Deportivo».

El mundo del cómic ha irrumpido con fuerza en el mercado editorial, por ello no es de extrañar que a las ya pioneras se sumen otras librerías especializadas en el amplio mundo del tebeo. El cómic americano tradicional es la principal oferta de Área 51 Comics, negocio emprendido por Fernando de la Guardia desde hace más de cuatro años en la calle Murga. «Era el sueño de toda mi vida, pues desde que tengo uso de razón era aficionado al género. Si no eres un adicto al cómic creo que es muy difícil montar un negocio de estas características, pues tienes que estar siempre al tanto de las novedades del sector, y también porque el comprador mayoritario lo integra gente muy bien informada, la mayoría coleccionistas muy exigentes».

Frente a la imagen estereotipada del tipo y edad de lectores de cómic, De la Guardia precisa que «la mayoría de mis clientes están entre los 30 y los 40 años, y tienen un alto nivel cultural, pues a la mayoría de los aficionados al cómic también les gusta la música o el cine. De todas maneras, esto va por edades: a los que rondan los 60 años les gusta el género futurista; a los de que tienen 50, el europeo; a los de mi generación, cerca de 40, el americano de superhéroes; y de ahí para abajo el manga rompe». Sobre este género japonés, De la Guardia manifiesta una cierta preocupación: «Se leen al revés que los libros habituales y muchos jóvenes se han acostumbrado a esta forma de leer, tanto que cuando ven un libro normal me dicen que está al revés».

Texto íntegro en el suplemento Pleamar de la edición impresa de hoy

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