Jaque a la exclusión social en Las Palmas I
Juan José Sosa
Sábado, 10 de marzo 2012, 23:20
Desde finales del mes de enero la Federación Insular de Ajedrez de Gran Canaria ha puesto en marcha un proyecto que desarrolla la vertiente social, cultural, lúdica y de integración, que tiene por objeto la introducción del ajedrez en el Centro Penitenciario Las Palmas I (Salto del Negro).
La iniciativa, que ha sido posible gracias al tesón del equipo docente del centro, está apenas en su primera fase, pero comienza ya a obtener sus primeros resultados dado que tras casi dos meses de actividad se registra la presencia regular de medio centenar de reclusos.
Juan Viera Pérez, profesor de dilatada experiencia en la Enseñanza Primaria, y encargado de impartir los cursos comenta: "La práctica del ajedrez y su estudio constituye una herramienta muy útil en el proceso de reeducación, resocialización y reinserción de la población reclusa como lo demuestran experiencias en centros de varios países, y como queremos hacer extensible en este centro. El ajedrez se ha consolidado como un excelente medio para el desarrollo intelectual, eleva la autoestima y la acción mental y proporciona placer en su práctica, todo ello aunado a su contribución en los procesos de socialización como es más patente en este caso".
En este sentido, y según el proyecto de la Federación Insular la propuesta se consolida diariamente como una alternativa recreativa, deportiva y de ocio de la población reclusa del centro penitenciario, que da respuesta a una vieja reivindicación social del centro, que ya desarrolló experiencias similares a esta hace bastantes años. Asimismo, el monitor reconoce que: "Los reclusos reconocen y valoran el esfuerzo y valentía de impartir la actividad en este medio, que para ellos significa mucho en su vida cotidiana".
Aparte del aspecto intelectual, cognitivo y social de la propuesta tampoco debemos olvidar que uno de los objetivos que persigue la Federación Insular de Ajedrez de Gran Canaria es el de mejorar la convivencia entre los internos, favorecer la interculturalidad, ayudarles a pensar con positividad aportando sensaciones de bienestar, eliminando el estrés, además de contribuir a retrasar su envejecimiento cerebral y a prevenir el Alzheimer.
Beneficios.
En las sesiones que se han celebrado hasta el momento, que tienen cabida los sábados en horario de mañana, también se ha podido constatar entre el medio centenar de asistentes la estimulación de su participación e iniciativa, canalización de la agresividad y favorecimiento del autocontrol. En el aspecto puramente ajedrecístico las nociones que se imparten corresponden a iniciación y tecnificación de primer nivel conceptos espaciales, aperturas y mates básicos.
Por su parte, el equipo docente del Centro Penitenciario valora positivamente la iniciativa de inserción de los módulos 5, 6 y 9, que estiman como necesaria dada la baja cantidad de reclusos interesados en cualquier tipo de propuesta educativa o cultural. Así, se pensó en enlazar algunas actividades deportivas a las que ya desarrollaban en el centro surgiendo la idea de la introducción del ajedrez.
Así, cada módulo nombró un responsable de coordinar y dinamizar la propuesta e implicarlos en el acondicionamiento de las aulas y su mantenimiento. En palabras de Cándido González, responsable de deportes, y de María José Castillo, docente de Las Palmas I: "La enseñanza del ajedrez desarrolla principalmente en el individuo una actitud favorable que permite apreciarlo como elemento generador de cultura; potenciación intelectual a partir del estímulo de la esfera cognitiva; garantizar la adquisición de conocimientos, habilidades y destrezas básicas necesarias para la incorporación a la vida activa; y sobre todo priorizar la resolución de problemas que les brinda la oportunidad de analizar, evaluar y proponer alternativas de solución a situaciones de la vida diaria".
Además de todos los beneficios que el equipo docente de Las Palmas I atribuye a esta irrupción en el centro no olvidan que en este entorno difícil es fundamental distraerse y olvidarse momentáneamente de sus preocupaciones de la vida diaria con buen uso del tiempo libre.
Tras estos primeros pasos, dados los buenos resultados de asistencia cosechados, y el progreso ajedrecístico que se constata en los alumnos se valora a medio plazo la introducción de un segundo día de impartición de cursos, y como colofón a toda la actividad desarrollada la celebración de un torneo interno entre los participantes, que premie su dedicación y constancia.