Varias capas de hojas de palma seca cubren el suelo de los palmerales de Santa Lucía de Tirajana. Son alfombras vegetales que harían de mecha en caso de fuego. El Ayuntamiento y los vecinos están preocupados y exigen al Cabildo de Gran Canaria y al Gobierno regional que actúen. El palmeral de La Sorrueda ya ardió en el año 1994 causando destrozos importantes.