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El acuario, un negocio de 10 millones al año

El acuario, un negocio de 10 millones al año

Jueves, 1 de enero 1970

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El acuario que construirá Loro Parque en la orilla portuaria del istmo de La Isleta será no sólo un revulsivo para la ciudad, sino una apuesta por renovar el mercado de los parques de ocio. Las primeras estimaciones económicas cifran en unos 10 millones anuales la expectativa de negocio.

Las cifras que se barajan en torno al proyecto del acuario de Las Palmas de Gran Canaria no dan pie a la duda. Se trata de una inversión con una rentabilidad asegurada, que generará un negocio cuyo volumen se sitúa en torno a los 10 millones euros de anuales, según las estimaciones que manejan las instituciones públicas implicadas en el proyecto.

La Autoridad Portuaria cifra el horizonte estable del negocio en unos 500.000 visitantes anuales, un ritmo que aportará un gasto medio de unos 20 euros, entre la aportación de taquillas y el merchandising vinculado a la promoción. El cálculo arroja una previsión ce al menos 10 millones de euros anuales, aunque los primeros años no se alcance esa cantidad, a la espera de que el producto se consolide en el mercado internacional del ocio.

La mayor expectativa de gasto por usuario viene de la mano de los turistas que llegan a la ciudad en crucero, una cifra no dejará de crecer en los próximos años. De hecho, la temporada que se inicia a finales de septiembre ya supondrá un hito para la historia de una ciudad con vocación turística; con las reservas ya aseguradas, por el Muelle de Santa Catalina pasarán el próximo invierno más de 800.000 visitantes, y la previsión de los expertos es que, en el plazo de tres años, se alcance el millón de cruceristas.

La inversión proyectada por Loro Parque, la empresa impulsora del acuario, ronda los 60 millones de euros, según la cifra expresada tanto por el alcalde de la ciudad, Juan José Cardona, como por el presidente de la Autoridad Portuaria, Luis Ibarra, lo que se traduce en que, con un escenario conservador (con ingresos por debajo de la previsión estimada), la inversión estará amortizada en una década. Entre los compromisos que forman parte del acuerdo suscrito con los inversores, está la de fijar en 50 años el plazo de la concesión administrativa que se otorgará, al ubicarse el proyecto dentro del recinto portuario. Un compromiso que aún necesita de la reforma legal en ciernes que prepara el Gobierno del Estado para elevar hasta el medio siglo el tope de los 35 años que ahora limita ese tipo de concesiones. todos confían en que el cambio llegará a tiempo.

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