Denuncia al cura de San Andrés por agresión

Como consecuencia de los golpes, según relata la afectada, debe usar collarín y siente constante dolor en el lado izquierdo de su cuerpo, además de la ansiedad que padece que le «impide dormir». Tal como explica Rosa, el pasado sábado 18, se dirigió a la Iglesia de San Andrés para hablar con el padre Báez «porque había hecho comentarios acerca de mí en una emisora local diciendo que yo maltrato a los perros». La mujer señala que cuando llegó a San Andrés se encontró con el cura en la calle y le preguntó si la podía atender o tenía que pedir cita y éste le respondió que hablaría con ella en ese momento. Añade que la hizo pasar a la Iglesia por una puerta pequeña. Rosa le preguntó si la conocía y, como él respondió que no, le preguntó que por qué hablaba de ella en la radio. Entonces, indica la denuncia de Rosa, cerró la puerta y empezó a darle puñetazos y cabezazos al tiempo que le impedía salir y la hacía callar. Indica que, cuando por fin pudo alcanzar la calle «a tropezones, gritando y llorando», varios vecinos del barrio de San Andrés acudieron a ayudarla y llamaron a la Guardia Civil y a una ambulancia. Fue trasladada al Hospital Doctor Negrín, cuyo parte de urgencias señala cervicalgia y dorsalgia postraumática. Además, al intenso dolor que Rosa sigue sufriendo, se suma el nerviosismo y un estado de ansiedad que le impide dormir desde entonces. «Sólo veo la imagen de ese hombre dándome cabezazos», dice. «Ahora me preguntan que cómo fui capaz de ir sola a hablar con Fernando Báez y lo único que digo es que cómo iba a tener miedo, si iba a hablar con un cura», agrega. El juicio está fijado para el próximo cuatro de abril.