Condenan a dos años de cárcel por ruido al dueño de un ‘pub’

La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Las Palmas notificó este lunes la sentencia que impone una condena de dos años de prisión y multa de 2.400 euros al vecino de Las Palmas Jesper Max Duran Arencibia como autor de un delito contra el medio ambiente en su modalidad de misión indebida de ruidos con riesgo de grave perjuicio para la salud de las personas.

El imputado ha sido condenado como expropietario del pub Le Club de la calle Rafael González Martín número 2 de la capital grancanaria (primera perpendicular a Malteses, tras el Gabinete Literario).

La Sala condena al empresario al considerar probado que en el desarrollo de la actividad del pub «con consciente desprecio por la salud de terceras personas, y con conocimiento de que su actividad podía estar causando perjuicios a los vecinos de la zona por el fuerte ruido provocado por la música, vino en incumplir, al menos desde febrero de 2007 y hasta la fecha de cierre [octubre del mismo año] la ordenanza municipal de protección del medio ambiente frente a ruidos y vibraciones, manteniendo un volumen de emisión de sonido procedente del local superior al máximo permitido por la norma».

La sentencia detalla una larga secuencia de denuncias vecinales por ruido nocturno y órdenes municipales instando al dueño a corregir las deficiencias entre febrero y octubre de 2007, incluso instando el cierre cautelar primero del local y el definitivo después.

Apunta que la exposición «continuada, periódica y prolongada en el tiempo» al volumen de ruido que emitía el pub por deficiencias en su insonorización provocó a tres vecinos de la zona «problemas de insomnio, cefaleas, ansiedad y estrés». Además de la condena penal, la resolución inhabilita al acusado para trabajar en cualquier actividad empresarial relacionada con el ocio nocturno durante un año.

En el caso estaba personada una vecina como acusación particular y solicitando cinco años de pena, pero la Sala ha acogido plenamente las tesis del Ministerio Público, representado en el proceso por el fiscal de Medio Ambiente y Urbanismo de Las Palmas Javier Ródenas.

La sentencia absuelve al actual dueño del local, ya que ha insonorizado correctamente. El ministerio fiscal no le acusaba. El fallo es susceptible de recurso ante el Tribunal Supremo.