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EFE
Jueves, 1 de enero 1970
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Clinton, que mañana dará la conferencia de clausura de una jornada que ha organizado la Sociedad de Fomento e Inversiones de Tenerife (Sofitesa) para impulsar a la isla como plataforma logística en el Atlántico entre Europa, Africa y América, llegó a la isla durante la madrugada de hoy.
El ex mandatario estadounidense, que tiene una lista de espera para este tipo de eventos de más de un año y medio, eligió Canarias por ser un punto importante para la labor de su fundación, según comentó Juan Verde, un americano de origen español que está vinculado al partido demócrata y que acompaña a Clinton.
Bill Clinton apareció en el hotel Abama Resort de Guía de Isora sobre las 12:15, una hora y quince minutos más tarde de lo previsto por la organización, fue recibido por el presidente del Cabildo tinerfeño, Ricardo Melchior, y por el consejero delegado de Abama Resort, Javier Bernal.
Tras posar para la multitud de fotógrafos y cámaras de televisión que esperaban su llegada, Clinton pasó junto a sus acompañantes a uno de los comedores del hotel, en el que saludó a todas las personalidades que se habían dado cita allí, y desde donde pasó directamente al campo de golf.
El ex presidente de los EEUU, que vestía camisa color salmón con rayas blancas y pantalón beige, llegó sonriente y con gafas de sol, acompañado por todo un séquito de guardaespaldas, a los que se le unieron un helicóptero y seis coches del Cuerpo Nacional de Policía y varios vehículos de la Guardia Civil, que lo escoltaron durante todo el trayecto.
Además, las medidas de seguridad se extendieron alrededor de todo el complejo hotelero y del campo de golf, con varios policías nacionales con perros amaestrados y con la seguridad privada del Abama Resort, que controlaba también los accesos al recinto.
Antes, sobre las 11:15 había llegado el presidente del Gobierno canario, Adán Martín, que aseguró a su llegada que sólo venía como invitado y que no tenía previsto reunirse con el ex presidente norteamericano, al tiempo que recordó que Clinton tenía ya ganado en la política un nombre y un espacio.
También hizo acto de presencia pocos minutos después de las 11.00 horas el alcalde de Santa Cruz de Tenerife, Miguel Zerolo, que compartió juego con Clinton, y que comentó con ironía que no se iba a poner nervioso a pesar de que no todos los días se tenía la oportunidad de jugar con una personalidad así.
Entre ellos, el presidente de Ashotel, Luis Cobiella, su homólogo de la CEOE, José Fernando Rodríguez de Azero, el presidente de la Cámara de Comercio, Ignacio González, y el presidente del Círculo de Empresarios del Sur, Pedro Suárez.
Este último destacó a su llegada el acierto que supone traer a este tipo de persona a la isla como promoción turística.
Suárez indicó que es importante que se hable de Tenerife en todo el mundo y brindó su apoyo a la administración para seguir trayendo personas que promocionen a la isla en el exterior.
Una vez finalizados los saludos de rigor, Bill Clinton, acompañado por Miguel Zerolo, y el resto de "rivales" se desplazaron en coches eléctricos por el campo para dar comienzo al partido.
El juego lo inauguró el golfista canario, Alfredo García, y le siguió el ex presidente de los EEUU, que envió la pelota fuera del campo en sus dos primeros golpes, y en un tercero logró que esta se quedara en la parte sucia del hoyo.
Le siguió el alcalde de Santa Cruz de Tenerife, que también se mostró torpe con el palo y desvió sus dos bolas hacia las palmeras del campo de juego.
Finalizado el partido, a los jugadores les esperaba un menú elaborado por el cocinero Martín Berasategui, en el que pudieron degustar varios platos con sabores canarios.
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