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Silvia Fernández y S.F. / Las Palmas de Gran Canaria
Jueves, 22 de febrero 2018, 19:30
El puerto de Granadilla, en Tenerife, ve peligrar su proyecto de instalar un dique flotante y destinarlo a reparaciones navales.
El muelle flotante que iba a ejercer de astillero y había sido adquirido por Palumbo Tenerife Shipyard a una empresa americana se ha hundido mientras estaba siendo remolcado a la isla de Tenerife desde Nueva Orleans.
Construido en 1967 y en desuso desde 2014, cuando cerró el astillero Avondale, el dique tenía prevista su llegada a Tenerife a finales de 2017 para ser el centro de operaciones de una base de reparaciones navales.
Según fuentes cercanas, el dique ha sufrido en su travesía el embate del mar a consecuencia de varios ciclones y finalmente una de sus dos secciones se ha hundido. La otra sí consiguió recalar en el puerto tinerfeño a principios de enero y ahora los técnicos evalúan el estado en el que se encuentra, dadas las inclemencias del viaje, y el coste de su reparación.
Estas fuentes dudan de que el proyecto pueda ponerse finalmente en marcha por el sobrecoste que debería afrontar Palumbo. Esta empresa italiana tiene astilleros en varios puertos italianos como Nápoles, Messina, Malta y Marsella.
Palumbo creía que la posición estratégica de Tenerife era ideal para crear un centro de reparaciones navales en el Atlántico, tal y como hacen Astican y Repnaval en Las Palmas.
El dique flotante adquirido en Estados Unidos tenía un tamaño de 270 metros de eslora y 78 de manga. Tras su adquisición, hubo expertos que advirtieron de los riesgos de la travesía para un dique con una antigüedad de más de 50 años.
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