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En Canarias no siempre es verano

En Canarias no siempre es verano

Cada vez son más las personas del norte de Europa que pasan el último tercio de su existencia viviendo en Canarias.

Canarias7 / Las Palmas de Gran Canaria

Jueves, 1 de enero 1970

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Las colonias nórdicas y alemanas son cada vez más numerosas y empiezan a tener un arraigo importante con nuestra tierra. Aunque son varios los factores que convierten a Canarias en su nuevo hogar, a nadie se le escapa que el motivo principal es el clima afortunado de las islas.

Sin embargo, debemos aclarar que una persona que ha vivido en el norte de Europa toda su vida piense que el clima canario es perfecto no significa que lo sea. Estamos, siendo sinceros y poco publicitarios, bastante lejos de la leyenda de los 23 grados durante todo el año. La propia orografía de las islas hace que mientras en el sur podamos tener cierta estabilidad climática -que es la que ha convertido a Canarias en el paraíso turístico que es-, el resto del territorio tiene las cuatros estaciones bien definidas -en invierno hace frío y en verano hace calor.

Las noches canarias son frías, la humedad es notoria y los cambios de temperatura bruscos son continuos. Por supuesto, no es el frío de los Pirineos ni los inviernos de Austria, ni siquiera suele nevar... pero debemos enfrentarnos a la verdad: en Canarias hace frio.

La leyenda de los 23 grados durante todo el año ha hecho que las construcciones estén poco preparadas para las bajas temperaturas. El cambio climático no está ayudando a mejorar las condiciones: el pasado invierno fue uno de los más duros que se recuerdan y las familias se ven obligadas a duplicar mantas y abrigos. Mientras nuestras casas son funcionales en verano, en muchos casos el invierno es bastante duro.

Buscar buenas soluciones a esta situación puede ser mucho más sencillo de lo que parece. Por ejemplo, cada vez más, las casas terreras cuentan con chimeneas. En los pisos, algunas personas recurren a pequeños aparatos de calor que aunque parezcan un buen remedio, pero no aportan confort ni calidad, son un parche irresponsable con el medio ambiente y con su factura de la luz.

Hace 20 años era tabú en Canarias hablar de poner calefacciones en casa. Ni era fácil ni era razonable. Pero hoy día, las soluciones son muchísimo más eficientes y responsables con el medio ambiente. Y lo más importante para todas las familias: suponen un buen ahorro económico.

Los nuevos equipos que comercializa Junkers Bosch son las calderas murales, adaptadas a la normativa existente y que forman parte de la gama ErP. Además, ofrece al cliente la combinación de cualquier tipo de caldera mural con otro equipo, como controladores, sistemas solares o bombas de calor para aumentar así el confort en su hogar, utilizando algunos de estos equipos la contribución energética aumenta tanto en calefacción como en agua caliente según la combinación elegida.

Solución a sus necesidades en calefacción

Junkers Bosch ofrece un amplio y completo programa de calefacción, en el que seguro encontrará la solución a sus necesidades:

Calderas murales a gas. Representan la opción más valorada para cualquier tipo de vivienda. Una amplia gama con modelos de cámara estanca y atmosféricos, mixtos y para sólo calefacción.

Calderas murales a gas de condensación. Modelos de alta eficiencia energética y avanzada tecnología. Una amplia gama con potencias de hasta 42kW capaces de trabajar directamente con sistemas de energía solar.

Calderas de pie a gas. Soluciones que nos permiten llegar hasta los 108 kW de potencia y calefactar superficies de hasta 1.080 m².

Calderas de pie a gasóleo. Para viviendas unifamiliares, casas de campo, urbanizaciones aisladas, donde la única y mejor energía es el gasóleo.

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