Manrique será «leal» a todos
Agustín Manrique de Lara se comprometió ayer tras ser reelegido presidente de la CCE a ser «leal» a todas las organizaciones empresariales que integran la patronal. También a la Feht, que ayer no acudió a votar para expresar su malestar por el escaso apoyo recibido de la patronal en estos 4 años.
Manrique de Lara inicia su segundo mandato al frente de la Confederación Canaria de Empresarios (CCE) con divergencias internas que ayer se comprometió a solventar. La ausencia en la votación de los diez miembros de la Feht, la sectorial turística, como forma de expresar su malestar por el «ninguneo» sufrido de los últimos cuatro años obliga a Manrique de Lara a hilar fino para contentar a todas las sensibilidades de la CCE.
La presentación a última hora de una cuarta candidatura a las vicepresidencias -que finalmente quedó fuera- y liderada por José Juan Socas en representación de las pymes, es otro indicativo de que dentro de la patronal movimientos que reclaman más espacio y voz.
Manrique dio ayer un paso en este sentido: aseguró que integrará en el comité ejecutivo, que se constituirá en un mes, tanto a la Feht (que preside José María Mañaricúa) como a la Fec (las pymes del comercio representadas por Socas).
«Me comprometo a buscar el consenso para que José Juan Socas se incorpore al comité ejecutivo y siga trabajando como hasta ahora. Turismo también estará, sin duda», indicó Manrique, quien criticó la ausencia de la Feht.
Manrique indicó que no entendía la queja de la sectorial turística, a la que «nunca se había abandonado». «No recuerdo en este mandato tener diferencias con esta sectorial» a la dio un «apoyo indudable».
En cuanto a las vicepresidencias, seguirán con Manrique los tres vicepresidentes que le han acompañado desde 2013: María de la Salud Gil (constructores); Vicente Marrero (metal y puerto) y Gustavo Ojeda (tabaqueros, industria).
Sin embargo, los apoyos recibidos por unos y otros fueron ayer una sorpresa. Salud Gil, que era la vicepresidenta primera y barrió en 2013 (sacó 160 votos, más incluso que Manrique), obtuvo ayer 82 apoyos, con lo que pasa a la tercera posición. Marrero, que era vicepresidente segundo, elevó sus apoyos ayer hasta los 162 y estará de número uno, tras Manrique. Ojeda consiguió 130 y pasa de vicepresidente tercero a segundo. Socas se quedó a las puertas, con 61 apoyos.
Traición en los votos y cuentas que no salen
Los resultados que arrojaron ayer las urnas en la elección de los tres vicepresidentes de la Confederación Canaria de Empresarios (CCE) dejaron entrever numerosas «traiciones» e incumplimientos de los acuerdos firmados previamente. Así lo aseguraron algunos de los candidatos, a los que no les cuadraban las cuentas. Distintas fuentes empresariales apuntaron a acuerdos a varias bandas. De un lado, los tres vicepresidentes -Salud Gil, Marrero y Ojeda- habían llegado a un acuerdo institucional para mantener el status quo de 2013. De otro, fuentes cercanas apuntaron que entre Fec (Socas) y Femepa (Marrero) se habían acordado apoyos mutuos. Y había quien aseguraba que el acuerdo del equipo actual era convertir en vicepresidente primero a Gustavo Ojeda. Fuera como fuere, la cosa es que el ganador indiscutible ayer fue Vicente Marrero, convertido en vicepresidente primero de la CCE mientras que Salud Gil perdía ayer la mitad de los votos de 2013, lo que le relegaba a la vicepresidencia tercera. Pese al resultado, Salud Gil negó «sentirse castigada». Al candidato de la Fec, que no fue elegido, tampoco le salían ayer sus cuentas. «Es lo que tiene el voto secreto», dijo.