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Brad Binder, rodando sobre el trazado de Brno. David W. Cerny (Reuters)
Binder sorprende en un día en el que los favoritos fallan
GP de la República Checa

Binder sorprende en un día en el que los favoritos fallan

El estado de la pista y el comportamiento de los neumáticos marcaron la carrera de MotoGP, en la que el sudafricano dio la primera victoria a KTM en la categoría reina

BORJA GONZÁLEZ

BRNO

Sábado, 8 de agosto 2020

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Lo visto este domingo en Brno fue histórico por muchos motivos. Primero, por ver ganar por primera vez a una KTM en MotoGP. Una moto que debutó en 2017 en el campeonato y que a base de mucho trabajo y con muchas penurias, cargado todo el esfuerzo principalmente sobre los hombros de Pol Espargaró, logró lo inesperado. Después, porque el protagonista de ese triunfo fuese el debutante Brad Binder.

El sudafricano (un piloto de esta nacionalidad no subía a un podio de la clase reina desde que lo hiciese Kork Ballington en 1982), campeón del mundo de Moto3 en 2016, y que rozó el título de la clase intermedia en 2019 (pagó un pésimo inicio de curso), fue capaz de imponer un ritmo imposible para los demás una vez que la caída de los neumáticos empezó a hacer el efecto esperado.

En realidad, sólo un piloto logró mejorar lo de Binder, Espargaró, aunque este terminaría por los suelos tras un toque de Johann Zarco en la curva 1, maniobra que fue sancionada por Dirección de Carrera como conducción irresponsable. Aunque la penalización no le quitó salir con premio de la República Checa en una jornada que bien podría haber terminado con un doblete para la marca austriaca.

¿Supone este éxito de KTM su llegada a la cumbre de MotoGP? Precisamente, la pregunta se queda sin respuesta una vez que este arranque de 2020 está acumulando factores externos que impiden ver el bosque en toda su extensión. En Jerez pilotos y motos soportaron unas temperaturas inusualmente altas; en Brno se enfrentaron a un asfalto en muy mal estado, hecho que se solapó con el mal rendimiento de los neumáticos. Sea como fuere, se vio un podio inusual, en un día en el que los teóricos favoritos naufragaron.

Pesadilla de Viñales

«No me lo podía creer, cuando he cruzado la meta he pensado 'madre mía' y no me lo podía creer pero ni siquiera he sentido la sensación. Hace apenas unos instantes que realmente me he dado cuenta de lo que acabo de conseguir. No sé cómo explicarlo y me siento muy feliz, con muchas ganas de que llegue la siguiente carrera», explicaba eufórico el ganador, el primer novato que gana una carrera en su año de debut en la clase reina desde que en 2013 lo hiciese Marc Márquez, el gran ausente en Brno, en el día en el que los llamados a mandar sin él en pista, fallaron.

Estrepitosamente, Andrea Dovizioso, aunque casi pudo dar por bueno su undécimo puesto final después de salir desde el decimoctavo lugar, su peor posición en una parrilla desde que compite en MotoGP. Y sobre todo Maverick Viñales, que se mantiene segundo de la general, aunque sólo sumó dos puntos, pagando como nadie los problemas de neumáticos. «Lo positivo de este fin de semana es que Fabio y Dovizioso también han fallado, y no se nos han ido en el campeonato», reconocía el de Yamaha, que vio a sus tres compañeros de marca terminar por delante: Franco Morbidelli firmó un muy buen segundo, de más a menos, después de liderar buena parte de la carrera, mientras que Valentino Rossi logró finalizar quinto y Fabio Quartararo séptimo, después de hundirse tras rodar segundo en el primer tercio de la prueba.

«Hay que intentar entender qué debemos hacer para ser fuertes. En Jerez fue igual, en carrera sufrí cuando en entrenamientos volaba. Esta moto va muy bien pero en carrera cuesta mucho. Hoy no hemos sido los únicos que hemos sufrido, pero he salido atrás y no tenía nada de ritmo», subrayó Viñales.

Una situación complicada para un piloto llamado a comandar la estructura japonesa, aunque se mantiene a 17 puntos del líder después de los tres primeros grandes premios, en una clasificación en la que Morbidelli ha ascendido hasta el tercer puesto tras estrenarse este domingo en un podio de MotoGP, lo que hace que Yamaha cope los tres primeros puestos.

El Mundial de motociclismo pone rumbo ahora hacia Austria, donde se disputarán dos grandes premios seguidos, el segundo bajo el nombre de Estiria. Un trazado peculiar, en el que la lluvia podría convertirse en otro elemento distorsionador más, y que suele ser terreno propicio para las Ducati.

Ahí se medirán las opciones en esta temporada de Dovizioso, que por ahora está sucumbiendo ante las Yamaha, a falta de ver si MotoGP continúa deparando sorpresas del calibre de las vistas este domingo en la República Checa.

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