Las míticas siglas GSi lucen en el Opel Insignia
La nueva generación Insignia ha rescatado un apellido ilustre en la historia de Opel: GSi, sinónimo de prestaciones, agilidad, en una palabra, deportividad, superando incluso a las anteriores versiones OPC, como ha quedado demostrado en el escenario referencia de la rapidez de un vehículo, como es el circuito de Nürburgring, el Infierno Verde.
Canarias7 / Las Palmas de Gran Canari
Viernes, 28 de julio 2017, 13:09
Con el fin de enriquecer la nueva saga Insignia, Opel recupera unas siglas que desde hace 33 años han acompañado a los modelos más prestacionales de su gama: GSi, las cuales llevan aparejada potencia, estabilidad, ligereza y sensaciones, que es justo lo que ofrece el portaestandarte de la firma alemana.
El nuevo sedán deportivo de Opel está propulsado por un poderoso motor 2.0 turbo de gasolina que combina la eficiencia de consumo con el rendimiento, pues es capaz de generar 260 CV y un par de 400 Nm para un consumo combinado de 8,6 litros/100 km.
Esta unidad de cuatro cilindros va acoplada a una nueva transmisión automática de ocho velocidades, que puede ser manejada mediante las levas del volante. Con la transmisión cambiando automáticamente, el conductor puede incluso preseleccionar los puntos de cambio en los modos Standard y Sport. Además del 2.0 litros turbo de gasolina, el GSi también ofrecerá un nuevo y potente motor diésel.
Suspensión ajustable
El Insignia GSi está equipado de serie con el chasis FlexRide mecatrónico, que permite adaptar los amortiguadores y la dirección en fracciones de un segundo; la centralita también cambia la calibración del pedal del acelerador y los puntos de cambio de la caja automática de ocho velocidades.
El conductor puede elegir entre los modos Standard, Tour y Sport. Sujeto al modo elegido, la dirección y la respuesta del acelerador puede ser aún más directa. Exclusivo para el GSi es el modo Competición, que se activa a través del botón ESP. Una doble pulsación permite a los pilotos más habilidosos encender y apagar el control de tracción.
El chasis deportivo, desarrollado en combinación con los neumáticos del alta prestación Michelin Pilot Sport 4 S y las grandes llantas de 20 pulgadas, ofrecen excepcionales niveles de agarre.
Una contribución importante proviene de la tracción integral con reparto vectorial del par incorporado de serie, única en este segmento. Este sistema de alta tecnología, sustituye un diferencial convencional en el eje trasero por dos embragues que pueden acelerar cada rueda trasera individualmente en fracciones de segundo, dependiendo de la situación de conducción. El molesto subviraje, en el que las ruedas delanteras empujan hacia el exterior de la curva, por tanto, queda casi desterrado del Insignia GSi.
Asientos deportivos
Igualmente destacables son los nuevos asientos deportivos desarrollados por Opel, que proporcionan un mayor soporte lateral, así como confort en largas distancias. Los asientos deportivos premium están certificados por AGR (Aktion Gesunder Rücken e.V. - Campaña para las Espaldas más saludables) y por lo tanto son ergonómicamente ideales.
Al igual que el Insignia Grand Sport, ofrecen ventilación, calefacción, masaje y laterales ajustables. En el GSi el elevado respaldo también cuenta con un reposacabezas integrado.
El cliente puede elegir entre dos combinaciones de cuero, cada una decorada con un emblema GSi. El logotipo también adorna con orgullo la parte trasera del coche, que lleva un spoiler eficiente para la carga aerodinámica necesaria en el eje trasero. El faldón trasero parece un difusor y cuenta con dos salidas de escape cromadas.
De forma similar, las entradas de aire cromadas están situadas delante de los pasos de rueda delanteros. Los aficionados también apreciarán el ambiente apropiado en el interior, como en la parte inferior aplanada del volante en cuero, los pedales de aluminio y el techo negro.