El atletismo en Canarias se desangra

Wenceslao Fernández, presidente de la Federación Insular de Atletismo de Tenerife, ha dado el primer paso. A través de un comunicado, la Tinerfeña anuncia que «debido a los graves acontecimientos ocurridos recientemente en el seno de la Federación Canaria de Atletismo, la situación de impago de la cantidad pendiente en relación a la temporada 2022, la demora en el pago del importe correspondiente a la temporada 2023, las escasas garantías de cobro y la total inacción por parte de la Asamblea de la Federación Canaria de Atletismo mostrada hasta ahora« han tomado la decisión de no realizar a partir del próximo 8 de julio «ningún control de marcas, ni campeonato en pista, pudiendo ampliarse el tiempo necesario hasta que tengamos garantías de cobro por parte de la Federación Canaria de Atletismo y la toma de medidas por parte de dicha Asamblea para garantizar su cumplimiento».

La Insular de Tenerife ha dicho basta y paraliza sus competiciones a partir de julio, mientras que Tere Romón, presidenta de la Federación Insular de Gran Canaria, anuncia que están estudiando medidas, que serán anunciadas próximamente, para intentar cobrar los casi 70.000 euros que la Federación Canaria les adeuda.

Se ha entrado en un bucle, en el que la federaciones no confían en su matriz, la Canaria. Muchos federativos, ante esta difícil situación, se preguntan si la Dirección General de Deportes del Gobierno de Canarias podría intervenir para solventar un problema que puede provocar que los atletas de las islas se queden sin competiciones en breve.