Adiós a un grande de los terreros: muere Barbuzano
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El herreño se consagró con una carrera plagada de éxito y respeto. Sus duelos con Santiago Ojeda, legendariosSecciones
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El herreño se consagró con una carrera plagada de éxito y respeto. Sus duelos con Santiago Ojeda, legendariosPedro Reyes
Las Palmas de Gran Canaria
Viernes, 31 de marzo 2023, 12:14
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Uno de los mejores luchadores de la historia , para algunos el más completo o incluso el mejor, es el herreño Barbuzano, que este jueves fallecía tras una larga enfermedad. Juan Barbuzano Martín había nacido el 16 de mayo de 1945 en Isora, isla del Hierro. Comenzó luchando en el Ferinto, equipo de su pueblo y con dieciséis años, su triunfo ante el buen luchador Miguel Armas, le consagró en su isla, donde ya era prácticamente invencible y un ídolo. Dado que el Hierro se le quedaba pequeño, se desplazó a La Palma donde en esa época, principio de la década de los 60, muchos de los grandes puntales estaban en la isla bonita. Firmó con el Benahore donde estaban otros grandes luchadores como Marcos Galván o Babache, logrando el título de liga. Allí estuvo tres años y alcanzó la categoría de puntal B.
Posteriormente se desplaza a Tenerife y ficharía en el Victoria , un conjunto donde lo ganó todo siendo ya un puntal A y teniendo en Gran Canaria magníficos duelos con Santiago Ojeda.
En 1973 deja el equipo donde cosecho más éxitos y marcha al Puerto Cruz, aunque antes había sido campeón del mundo de sambo y un año después de luchas floclóricas. En 1975 luchó con un equipo llamado Selección Herreña duranta tres temporadas y lo llevaba también al campeonato de Tenerife, marchando posteriormente al Campitos ,aunque ya con problemas de lesiones que le hacían pensar en abandonar la lucha canaria. Aún dejaría también al conjunto del barrio de Santa Cruz y posteriormente al Tegueste, entre los mejores.
Tras abandonar su etapa de luchador, en 1985 con 35 años, fue mandador del mítico Santa Cruz de Melquiades y compañía y el propio luchador tinerfeño decía que en los entrenamientos, derrotaba a toda la plantilla y solo él podía con su entrenador. Estuvo con periodos intermitente, hasta 1995, adquiriendo también gran fama responsable de un club.
Una de las grandes características del gran luchador herreño, además de su gran calidad , fue su gran amor por la lucha canaria donde era admirado por su nobleza y caballerosidad. «La caballerosidad de la lucha canaria es mayor que en otras luchas. Se trata de un deporte más noble y rara vez se ve un mal gesto», fue una de sus frases célebres.
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