Messi, Dest y Alba se dan un festín a costa de la Real

El conjunto de Imanol Alguacil, que intenta que la final de la Copa 2019-20 del 3 de abril ante el Athletic no descentre a sus jugadores, le tiene ganas al Barça, que le superó con apuros en la primera vuelta en el Camp Nou y que en enero le dejó sin final de la Supercopa de España en la tanda de penaltis tras el 1-1 de los 120 minutos. La igualdad es evidente en los últimos enfrentamientos y en San Sebastián se espera que haya llegado el momento de imponerse.

Sergi Roberto participó en el último entrenamiento, pero todavía no entró en la convocatoria y sigue de baja por lesión, al igual que Ansu Fati, Gerard Piqué y Philipe Coutinho. La Real, por su parte, podrá contar con Zubimendi, pero no con Silva, Monreal, Elustondo, Zaldua y Moyá.

«Es verdad que es el tercer partido que jugamos contra ellos. Es un equipo fuerte. Es uno de los mejores de este campeonato y quiere construir, presionar al rival. Hubo muchas cosas interesantes en los otros dos encuentros. Fue justito y quiere decir que será complicado», señaló Koeman en una rueda de prensa en la que no quiso hablar de doblete ante la cercanía de la final de Copa 2020-21 ante el Athletic del próximo 17 de abril: «Por un lado no me gusta hablar de doblete. Esto cambia rapidísimo. Hace tiempo fuimos malos y no había nada bueno. Hay que seguir trabajando, partido a partido. Vamos cuatro puntos por detrás, hay un calendario dificilísimo. Falta mucho para ganar muchas cosas. El equipo está concentrado en el partido de mañana y es más importante que el de dentro de tres semanas».

El técnico neerlaandés está más tranquilo sabiendo que ya hay presidente: «Es importante que haya un presidente y un futuro. Ahora podemos hablar y es una tranquilidad tener a alguien que es la cara del club de dentro y hacia fuera. Y a nosotros nos toca lo mismo, jugar, prepararnos y ganar. Pero sí es importante tener a Joan Laporta como presidente».

En la Real, Imanol avisó del gran momento de Leo Messi, haciendo una llamada al funcionamiento colectivo para contrarrestarle: «No hay entrenador ni equipo que frene a Messi cuando está en forma».

Habitualmente pasa desapercibida entre sus casi ilimitadas

La cuestión de los carrileros no es

Casi sin tiempo para medir la

Llegado a este punto uno podría pensar que el Barcelona se dio un baño y masaje en Anoeta (por motivos publicitarios, Reale Arena), aunque lo cierto es que hasta el 0-1, nada más lejos de la realidad. Dominaba el balón el conjunto azulgrana, sí, pero no solo no conseguía provocar peligro alguno en el área de la Real Sociedad, sino que era el conjunto donostiarra el que había estado más

Con el partido sentenciado, Koeman aprovechó para dar descanso de cara a la final de Copa del

La victoria mantiene al Barça en el pulso por el