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Hasta siempre, Gregorio

Hasta siempre, Gregorio

Adiós a un icono. Greg Stewart (New York, 1960), apodado cariñosamente como Gregorio en la isla, fallecía ayer a los 57 años en un hospital norteamericano. El expívot claretiano sufría en 2016 un infarto tras recibir un golpe practicando basket callejero que lo mantenía, desde entonces, en la delgada línea entre la vida y la muerte.

Óscar Hernández Romano y / Las Palmas de Gran Canaria

Jueves, 1 de enero 1970

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Stewart no fue un jugador más en la trayectoria claretiana. Debutó en el baloncesto español en las filas del CAI Zaragoza (1982/83) en Primera División, luego pasó al Joventut (dos cursos), pero fue en Gran Canaria donde brilló y firmó su mejor etapa deportiva, primero en Primera B (dos años) y posteriormente en la ACB (hasta la temporada 1991-92). Abandonó el baloncesto profesional en el 2000, aunque desde entonces siempre se le podía ver jugando al basket callejero en las canchas grancanarias.

En julio de 2016, el expívot de los amarillos sufría un fuerte golpe en la cabeza mientras jugaba un partido de baloncesto callejero en Miami, que le provocó un infarto. Tras permanecer cinco semanas en estado de coma logró despertarse, comenzando un proceso de recuperación que pasó por diferentes etapas alternando pequeñas mejorías con recaídas que lo llevaron, por último, a un estado vegetativo que finalmente provocaron su triste fallecimiento.

En sus tres años en la élite con los grancanarios jugó 111 partidos –en su primera temporada en la ACB promedió 27 puntos, 10 rebotes y 26 de valoración– y vivió dos descensos.

Líder en las canchas y querido y admirado fuera de ellas, Stewart deja un vacío imposible de llenar a todos los niveles. Un recuerdo imborrable para los que tuvieron la suerte de verlo jugar. Una auténtica estrella que pasó por Gran Canaria.

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