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Los dibujos de Millares viajan a Santander

Los dibujos de Millares viajan a Santander

El artista grancanario Manolo Millares (Las Palmas de Gran Canaria, 1921 - Madrid, 1972) será uno de los grandes protagonistas de la programación expositiva de la temporada 2018 del Centro Botín, en Cantabria. Cristina Iglesias y Joan Miró son otros de los grandes nombres españoles que forman parte de la propuesta.

Jueves, 1 de enero 1970

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El estudio y catalogación del dibujo de los grandes maestros de la historia del arte español desde el siglo XVI es uno de los principios del programa de Artes Plásticas del Centro Botín. En ese contexto se enmarca El grito silencioso. Millares sobre papel, una muestra «concebida única y exclusivamente» para el Centro Botín y «la primera exposición dedicada íntegramente a los trabajos en papel» del artista grancanario.

Célebre por el uso de arpilleras, sacos, cuerdas y otros materiales en sus obras, el artista desarrolló a lo largo de su trayectoria artística una importante obra dibujada que se pone de manifiesto en esta exposición, explican desde el Centro Botín.

Comisariada por María José Salazar, conservadora del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía y miembro de la comisión asesora de Artes Plásticas del Centro Botín, El grito silencioso plantea un recorrido cronológico desde sus inicios académicos, paisajes con acuarelas, composiciones surrealistas y trabajos de influencia aborigen, para centrarse en su producción entre 1955 y 1972, «con obras de gran fuerza y originalidad».

«Es una exposición muy interesante porque el de Millares no es el dibujo clásico sino que aporta esa nueva mirada, una apertura que se hace en el dibujo en los años 50 concibiendo el dibujo como una nueva vía de expresión que ya no depende de otras artes. Y no se trata solo de un cambio conceptual sino que también se modifica el trazo y el gesto, que adquiere más valor, frente a la línea antigua en la que predomina el sentimiento. Esta corriente, este nuevo camino del dibujo lo abre y lo ensalza en España Manolo Millares», explicó Salazar en conversación telefónica.

La exposición incluirá piezas de la serie Los curas, realizada entre 1960 y 1964, donde el artista ofrece un catálogo de oscuros personajes que van desde la caricatura a lo siniestro; y otras series como Animales en el desierto o Mussolini, ambas de 1971, según adelantó el Centro Botín.

«Millares dibujó durante toda su vida, desde niño, en el colegio y en casa siempre tenía un lápiz y un papel para dibujar. Su vida artística comienza dibujando, luego hace acuarelas de paisajes de Canarias, pero en esta época era un dibujo tradicional, clásico. Pero era un hombre que nunca estaba contento con lo que hacía, siempre buscaba más, era muy inteligente. Conoció la obra de Dalí y se adentró en el surrealismo, pero también tiene dibujos constructivos, se fijó en la obra de Miró y de Paul Klee. Millares es ese dibujante que se va formando lentamente hasta crear su propio leguaje. Esto te da la pauta de lo que es un gran dibujante. No espere ver unas manchas cuando antes hacia un dibujo clásico, sino que pasa por diferentes estéticas», explicó la comisaria de El grito silencioso. Millares sobre papel.

María José Salazar.
María José Salazar.

Según la experta, una de las sorpresas que se ha llevado durante el proceso de preparación de esta muestra es que se sabía que Millares es un nombre importante del arte español, pero se puso «a hacer la lista de museos donde está representado y me salieron tres folios. Hay obra suya en el MoMA de Nueva York, en el Pompidou de París... Millares está en los grandes museos del mundo y está formando parte de sus colecciones desde los años 50 y 60. Eso engrandece aún más su figura porque desde fuera lo han reconocido», afirmó con satisfacción.

María José Salazar es la comisaria de El grito silencioso. Conservadora del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía y miembro de la comisión asesora de Artes Plásticas del Centro Botín. La historiadora del arte, comisaria e investigadora, que está especializada en arte contemporáneo, cree que en la obra dibujada de Millares están presentes todas las características que hicieron del canario uno de los mejores artistas españoles.

«Tuvo que ser un hombre muy inteligente, muy apasionado de su propio trabajo, murió joven en un momento creador impresionante», afirma sobre el artista grancanario.

La muestra dedicada a la obra dibujada de Millares será la segunda de este tipo, tras la que protagonizaron los dibujos de Francisco de Goya.

«Ya tengo unas 100 obras pertenecientes a la familia, de colecciones privadas de Canarias y de museos que conservan obra sobre papel», añadió Salazar, quien reconoce que ya se ha hecho alguna «pequeña exposición» de este tipo, pero no tan amplia.

Benjamin Weil /  Belén de Benito
Benjamin Weil / Belén de Benito

La exposición se complementará con un catálogo en el que se reúnan todos sus dibujos. «Esperamos que esto sirva para valorar el dibujo. Mucha gente lo ve como obra menor, pero en absoluto. Millares es un gran dibujante que rompe en los años cincuenta con lo tradicional», insistió.

«El dibujo es una forma muy específica de creación artística, quizás la más cercana a la mano del artista. Cuando se mira el trabajo de Millares en el dibujo claramente se desvela, de una cierta manera, la esencia de su trabajo», afirma Benjamin Weil, director artístico del Centro Botín.

A su juicio, en la exposición que su centro dedicará a Manolo Millares el próximo año mostrará cómo evolucionó la carrera del artista canario «desde una práctica más figurativa a una más abstracta», pero también, añade Weil, «veremos el juego con la materialidad misma de los elementos que utiliza porque eso se ve muy claramente en su obra dibujada».

El grito silencioso saca a la luz «un aspecto menos conocido de un gran maestro como Millares», apunta Weil, que enmarca esta exposición «con el trabajo de la Fundación Botín y la investigación sobre el dibujo de los grandes maestros españoles. Un interés que se ha desarrollado en los últimos 8 años y que abre nuevas puertas porque vamos explorando la obra dibujada grandes pintores. La última estuvo dedicada a Goya y, ahora, con la de Millares, abordamos el dibujo contemporáneo, aunque el trabajo de Goya dibujado revela también un modernismo indecible hay una relación claramente entre esta exposición y la de Millares».

Weil asegura que en esta muestra se verán dibujos de Millares «poco conocidos» y que se han expuesto en «raras ocasiones» y «esa mirada retrospectiva también da una nueva pista sobre la trayectoria del artista que conocemos, el Millares de la tela destruida o esos lienzos con el negro como protagonista porque en la obra dibujada también están».

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