Borrar
Antonio Carmona: «Estoy al servicio de la buena música»

Antonio Carmona: «Estoy al servicio de la buena música»

Antonio Carmona da vida a una interesante paradoja con su último álbum en solitario, titulado Obra son amores. Sobrevuela en el disco el recuerdo de su padre, el guitarrista flamenco Juan Habichuela, fallecido en 2016, pero sus canciones, tanto la que le dedica directamente, Mencanta, como las restantes no son nostálgicas, sino vitales.

Jueves, 1 de enero 1970

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

«La forma de despedir a mi padre no es trágica. La música era la única forma que se me ocurrió para despedirme de él. Lo he hecho con toda la energía que tenía. No solo perdí a un padre. Perdí a un maestro y a un amigo. Una persona con la que ya estaba de gira cuando yo contaba con 14 años, viajábamos siempre juntos. Jugaba a las cartas todos los días con él... pero a la hora de decirle adiós, con música, no he apostado por una despedida trágica, sino por una rumbita», asegura por teléfono el cantante, que presentará su nuevo álbum en directo con su banda, el próximo 13 de julio, a partir de las 22.00 horas, en la plaza de Santa Ana de la capital grancanaria, dentro de la programación de la 22ª edición del festival de teatro, música y danza Temudas.

Con respecto a esta cita musical gratuita en el corazón de Vegueta, Antonio Carmona asegura estar expectante. «Tengo muchas ganar de ir, porque en Canarias entienden muy bien mi música, desde siempre, desde Ketama y después con mis tres discos en solitario. La gente siempre es muy receptiva a mis creaciones», añade el cantante y compositor granadino, de 53 años.

En Gran Canaria se plantará con la intención de que el público «se divierta». «Van a poder escuchar el Obras son amores, que me hace mucha ilusión mostrarlo en directo sobre el escenario. También incluiremos temas de Antonio Vega y un popurí de Ketama... va a ser un concierto con un repertorio muy variado», adelanta Antonio Carmona.

A estas alturas de una carrera sustentada sobre los fuertes cimientos del éxito mayúsculo que cosechó Ketama, tiene claro cuál es su objetivo cada vez que entra en el estudio para diseñar un nuevo proyecto discográfico.

«Estoy al servicio de la buena música y de las buenas composiciones. Para mí, es muy importante que yo me quede a gusto con el disco. A esto le sumo que llevo toda la vida haciendo directos. Creo que suenan muy bien. Tengo una banda bastante amplia para los tiempos que corren. Cuento con dos guitarras flamencas, una eléctrica, bajo, batería, percusión, coros... somos nueve músicos sobre el escenario. Estoy mal acostumbrado, porque siempre suelo estar acompañado por muy buenos músicos», apunta entre risas.

Dentro del Temudas se presentará con una banda compuesta por: Juan José Carmona Reyes (guitarra), Félix Estévez Parras (teclado), Antonio Montoya Montoya (percusión), Marcelo Carlos Fuentes Resco (bajo), Enrique Emilio Ferrer Osini (batería), Ricardo Palacín Pla (guitarra eléctrica), Lucía Carmona Orellana y su hermana Marina (coros) y Carlos Carmona González (guitarra española).

Señala que está muy satisfecho con el resultado final alcanzado con Obras son amores. «Nos hemos llevado ya muchos reconocimientos desde que lo publicamos, incluida una nominación a los Grammy», dice con orgullo.

Desde sus inicios, Antonio Carmona se ha caracterizado por una evidente querencia hacia la investigación musical y la fusión de estilos. Esta tendencia sigue activa dentro de su filosofía artística, aunque con un matiz importante.

«A la hora de componer sigo explorando e investigando mucho. En cuanto al sonido, ya di lo que tenía que dar. Hice en su momento cosas con hindúes, con africanos, con gaitas... fuimos [alude a Ketama] el grupo que más fusión ha hecho en este país. Hicimos giras con Prince, Sinatra... Ahora lo que quiero es hacer buenas canciones con las que yo me quede tranquilo. El sonido ya no me preocupa tanto», comenta.

El sonido al que alude está muy claro en este último álbum que presentará en la capital grancanaria. «El sonido de Obras son amores creo que es muy internacional, un terreno en el que me siento a gusto. La música latina, por ejemplo, la hago desde que tenía 13 años. Lo que sucede es que en este país van todos con cierto retraso [risas]. La escucho desde que era chico y la utilicé desde mi primera rumba. Ahora parece que se ha puesto de moda y creo que no estoy para ponerme a rebufo de lo que se lleva o se escucha más. Yo ya lo hice en su tiempo y me siento orgulloso», deja claro.

Antonio Carmona no se muestra muy optimista sobre el camino por el que transita actualmente la música en España. «En los últimos años es muy difícil encontrar buena música. No me voy a meter con estilos musicales, artistas y con nada de eso... Ahora hay que buscar con lupa a los artistas diferentes, a los que no son uno más dentro de las corrientes que están de moda. Hay muy poquitos artistas distintos, que sean capaces de sorprender con su talento y originalidad», dice con pesar.

Atribuye esta preocupante realidad «a las radios y a las compañías de discos». «Ellos son los que meten el dinero a plazo fijo, a caballo ganador. Antiguamente, la compañía Nuevos Medios apostaba por la diversidad. Era alucinante. Ahora, lo que buscan es ganar dinero rápido y poder vivir muy bien. En estos momentos, las compañías, las radios y la Sociedad General de Autores se me han ido al fondo de los mares», lanza.

Ante esto, tiene claro que «el directo» es la principal vía de supervivencia. «Hay artistas que no necesitan sonar en las radios y siguen llenando sus directos. Son pocos los fenómenos así. Mira lo de Vetusta Morla, que metió más de 30.000 personas en un concierto, y Rosendo, que no aparece en la radio y sigue con sus llenazos, porque es un grande y lo será hasta la muerte».

Cuestionado sobre si hay posibilidades de que Ketama vuelva y aparezca el esperado Songhai 3.0, Antonio Carmona se muestra cauto. «Primero tendría que ser Ketama y después Shongai. Esa es la evolución. Ahí estamos... hablando. Se está preparando un homenaje a Antonio Vega y a lo mejor nos juntamos ahí. Shongai fue uno de los discos que más alegrías nos dio, abrió la mente de los músicos españoles», recuerda este músico que no descarta incluir el sonido del timple en alguno de sus próximos proyectos.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios