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Diez nuevas apuestas de S/T

Diez nuevas apuestas de S/T

Una decena de artistas, cinco mujeres y cinco hombres, ha ocupado la sala S/T Espacio Cultural para mostrar por dónde transitan sus respectivos lenguajes y discursos en una muestra heterogénea que, sin embargo, se titula Equivalencia.

Jueves, 1 de enero 1970

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Esta es la segunda edición de una iniciativa que pretende abrir este espacio galerístico a creadores que no habían expuesto antes en este local situado en la calle de Enmedio de la capital grancanaria.

En esta ocasión, los artistas que exhiben sus trabajos hasta el 29 de octubre son: Idaira del Castillo (Tenerife, 1985), Óscar del Mar (Tenerife, 1981), Israel Jiménez (Gran Canaria, 1983), Nicolás Laiz Placeres (Lanzarote, 1975), Julia María Martín (Tenerife, 1979), Pura Márquez (Lanzarote), Laura Mesa (Tenerife, 1975), Iván Santiago (Gran Canaria, 1981), Alfons Simó (Barcelona, 1971) y Cristina Toledo (Gran Canaria, 1986).

La depredación del paisaje, la resignificación de los desechos o el efecto del capitalismo feroz sobre el territorio y la identidad son algunas de las cuestiones que abordan estos creadores a través de instalaciones, objetos, pinturas y fotografías.

En el caso de Óscar del Mar, al regresar a su isla después de pasar quince años en Berlín, recogió residuos en un barranco de la localidad tinerfeña de San Miguel de Abona y los expone, como si fueran insectos, a modo de científico decimonónico y empleando el negro sobre negro.

Por su lado, Cristina Toledo exhibe cinco cuadros en los que convierte la imagen fotográfica en pictórica, de este modo les da mayor peso y significación en un mundo saturado de estímulos visuales. Justo el proceso inverso es el que realiza Pura Márquez, que insufla un carácter pictórico e irreal a sus tres fotografías.

Nicolás Laiz Placeres reflexiona sobre el paisaje y el exotismo como concepto cultural y económico inspirándose en los souvenirs y el colonialismo. En concreto, presenta una toalla kitsch que ironiza con los prejuicios atávicos sobre Canarias y una serie de piezas, hechas con resina y basura, que representan ocho ídolos de Tara, un camello y un cráneo.

Las telas cosidas son los elementos esenciales de las composiciones de Idaira del Castillo, que plasma su cotidianidad con un lenguaje poético y pictórico. Al igual que Julia María Martín, que juega con materiales textiles en las nueve composiciones que propone. Sus cuadros tridimensionales, compuestos por piezas forradas, cosidas y encajadas, deconstruyen la pintura hasta convertirla en objetos escultóricos llenos de sutileza.

También Iván Santiago crea composiciones con objetos. En su caso, rodea envases de alimentos en un marco de tabletas de medicamentos. De este modo, formula una crítica a un mundo superpoblado y consumista alimentado por una industria frívola, manipuladora e insana.

Igualmente crítico es el trabajo de Alfons Simón que asocia las prácticas sadomasoquistas a elementos del golf para poner de manifiesto la violencia del poder y del neoliberalismo. El artista desarrolla este discurso a través de objetos, fotografías, pinturas y dibujos.

Israel Jiménez presenta ocho pinturas de rostros envueltos en sudarios, con objetos sobre ojos y boca, para resaltar el valor que damos a ciertas cosas.

Por último, Laura Mesa exhibe tres piezas a medio camino entre la escultura y el dibujo con grafito y hojas superpuestas. Su propósito es, según explica, «redefinir nuestra relación con lo real y su representación».

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