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Tino Lores y Laurie Dennett, dos anfitriones de altura para guiarte hasta Santiago

Él popularizó el Camino Portugués hace casi tres décadas, ella cultiva, cerca del itinerario francés, el primer jardín tranquilo de España. Hoy sus caminos se juntan para contarnos hasta qué punto el peregrinaje ha marcado sus vidas

Laura Fortuño

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Tienen una magia especial en los ojos, ¿te has dado cuenta? Quizás es porque saben mirar donde otros todavía no ven nada. Me refiero a las personas que dan origen a las cosas, aquellas capaces de hacer que algo comience, que cobre vida. La gente que hace historia. Es como lo que consiguió Tino Lores, el señor del sombrero y la gabardina con quien uno nunca tiene ganas de que acabe la conversación: creó la asociación Amigos do Camiño Portugués a Santiago en el año 93 y de no conocerse la ruta pasó a ser la segunda en número de peregrinos. O también como lo que hizo la escritora e historiadora canadiense Laurie Dennett: donde no había nada, ella construyó el primer ‘quiet garden’ de España, un jardín tranquilo que se ha convertido en un oasis de paz cerca de O Cebreiro, en Galicia. Una réplica del laberinto de la Catedral de Chartres en su propia casa disponible para quien quiera pasar un rato agradable y disfrutar de la calma que proporciona el entorno.

Para Tino Lores el Camino de Santiago, en cierto modo, es como un laberinto, no porque no sepa dónde está la meta (no es capaz de recordar las veces que lo ha recorrido, de hecho, él “vive en el Camino», dice) sino porque le gustaría no salir nunca de él: “El Camino me enganchó, llevo casi 30 años siendo presidente de la asociación, aunque siempre digo que si me dedico a esto es porque no tengo nietos”, bromea. “Lo hago porque me gusta, porque amo el Camino, amo a los peregrinos y amo a Santiago. Siempre hago la siguiente comparativa: si en lugar de una asociación hubiese montado una empresa, a la vista del éxito obtenido, ¡hoy sería millonario! Y bueno, no soy millonario… pero sí soy millonario en amigos. A cualquier sitio donde voy tengo alguien que me conoce. Francia, Inglaterra, México…”, cuenta el académico de la Academia Xacobea.

El mural de Tino Lores ha sido creado por Daniel Eime. A Laurie Dennett la retrató el pasado año el artista Mon Devane.

Laurie Dennett también es una mujer de mundo. Aunque nació en Toronto (Canadá) vivió muchos años en Londres, hasta que un día cambió el bullicio de La City por la calma de una aldea en la que no vive ni una docena de personas: “No entiendo cómo conseguí sobrevivir con tanto tráfico, gente y ruido porque aquí no tenemos nada de eso. Galicia es para mí casi el paraíso y cuando vuelvo a Londres cuento los días que faltan para regresar”, confiesa Laurie. Tanto ella como Tino protagonizan dos de los murales de “Las Estrellas del Camino” una exposición comisariada por Estrella Galicia para homenajear a todas las personas que viven y hacen posible el Camino de Santiago.

Laurie Dennett cambió hace diez años el bullicio de La City londinense por la calma de una pequeña aldea de Galicia, muy próxima al Camino de Santiago

Tras su éxito en 2021, que ocupaba el recorrido francés (de hecho, el mural de Laurie lo pintó el año pasado el artista Mon Devane y se encuentra a la entrada de Santiago), este año se amplía con 230 kilómetros más entre las etapas del Camino Portugués con el diálogo como hilo conductor, porque en palabras de Tino Lores, en el Camino te encuentras con gente que te habla, te ayuda, te orienta sin pedirte nada. Por eso, los murales, pintados por la artista gallega Lula Goce y el portugués Daniel Eime, se van alternando durante todas las etapas, reflejando así también el hermanamiento entre los dos pueblos.

Estrella Galicia

“Soy millonario en amigos. A cualquier sitio donde voy tengo alguien que me conoce”

Tino Lores

Un ejemplo del fuerte vínculo entre Galicia y Portugal, y que al mismo tiempo ilustra su devoción por el Camino, nos lo demuestra Tino cuando nos descubre que él todavía recuerda, y han pasado casi 23 años, el nombre del primer peregrino portugués que se alojó en el albergue que la asociación tiene en la calle Otero Pedrayo de Pontevedra: “Todos somos voluntarios, nadie cobra nada. El primer peregrino portugués llegó hará 23 años el 11 de agosto. Recuerdo que estaba en el bar que había cerca, esperando a que se abriera el albergue por primera vez para entrar. Se llamaba Amaro Franco”. Es para quitarse el sombrero… el mismo que Tino Lores luce con una elegancia cinematográfica (colecciona más de una treintena) a sus 71 años. Y no es ninguna exageración, de hecho, cuenta divertido que el día que grabó junto a Laurie Dennett las escenas de Santiago del documental que también forma parte de la exposición comisariada por Estrella Galicia, una señora le confundió con Humphrey Bogart.

El diálogo de

Dos artistas

una “conversación” a través de sus obras

Lula y Daniel alternan sus murales durante todas las etapas del camino portugués generando un diálogo y creando un ritmo visual hipnótico

La artista Lula Goce nació en Baiona (Pontevedra) y es licenciada y doctorada en Bellas Artes por las universidades de Salamanca y Barcelona. Siempre vinculada al arte urbano de gran formato, ha pintado en ciudades emblemáticas como Nueva York o París.

Daniel Eime, portugués de nacimiento, es considerado como “un maestro del stencil”, pero siempre le da su sello particular a la técnica. Licenciado en Escenografía, poco a poco fue centrándose en el arte urbano. Sus murales a gran escala y sus imágenes son sus señas de identidad.

“Lo que le da ese sello único al Camino de Santiago son sus 1200 años de historia», relata orgulloso Tino Lores. «Una vez estaba en México promocionando el Camino, en una reunión de empresarios. Y al acabar, me dijeron que ellos también querían hacer un camino como el de Santiago, que qué me parecía. Y yo: Ah, muy bien. ¿Tienen ustedes un santo? Genial. ¿Y un monasterio o una catedral? Estupendo. Pues lo ponen como final de camino, diseñan unos 100 kilómetros, lo preparan, lo señalizan, hacen una red de albergues, unas credenciales… y después esperan ustedes 1200 años”, suelta, provocando una enorme carcajada en mí cuando le escucho.

“El camino hay que hacerlo, no vale que yo te lo cuente. Es la cosa más solidaria que existe y también la más egoísta, porque todo el mundo dice que el mejor es el que hizo él”

Y es que Tino provoca en los demás el mismo efecto que causa en él el Camino: es adictivo. Tino, que ha recorrido el Camino de Santiago incluso con su majestad Felipe VI, está emocionado con el mural que Daniel Eime ha pintado en Pontevedra: “Me quedé muy feliz porque fue una propuesta del ayuntamiento que yo representara a la ciudad, además es un retrato precioso, el artista es muy bueno, y entre nosotros, el modelo no está nada mal”, bromea. “Traté de representarlo de frente, como saludando a los peregrinos, como si estuviera recibiéndolos, ya que Tino es una persona con una gran conexión con el Camino de Santiago”, nos explica el artista que ha pintado su mural, Daniel Eime.

Una conexión que sin duda comparte con Laurie Dennett, a quien le gusta decir que “el Camino no termina en Santiago, Santiago es donde empieza, tu peregrinación es el resto de tu vida”. La escritora, por ese motivo, quiere compartir un consejo muy valioso con quienes se animen a realizar el Camino de Santiago, y es que no reserven el billete de vuelta: “El ‘mataplaceres’ más grande que hay es tener comprado el billete de avión para dos días después del día que vas a llegar a Santiago. Si después decides que quieres seguir hasta la costa, ¿qué haces?” Quizás esa sea una de las razones del magnetismo del Camino de Santiago: que nunca sabes con qué sorpresas va a recibirte cada vez.

un proyecto con

“Las Estrellas del Camino” crece con una nueva galería artística que une las diez etapas del camino portugués desde Oporto hasta Santiago.

Después del gran éxito de “Las Estrellas del Camino”, la exposición más extensa del mundo, este año vuelve a celebrarse el Xacobeo 2022 con una nueva galería de arte bajo el mismo nombre y comisariada también por Estrella Galicia, que suma otros 230 kilómetros de murales al aire libre. Los retratos que forman la exposición se presentan como un sincero homenaje a las personas que mantienen vivo el espíritu del Camino y acompañan a los peregrinos entre las etapas de Oporto a Santiago de Compostela. Una ‘conversación’ artística entre Lula Goce y Daniel Eime que alterna sus murales durante todo el recorrido y cuyo hilo conductor es el diálogo, potenciando la idea de experiencia colaborativa y de unión entre culturas, personas y pueblos que representa el Camino. Además de los murales, los protagonistas conversan entre ellos en una serie de cortos donde comparten lo que significa el Camino en sus vidas.

Créditos

Proyecto coordinado por:

Cecilia Marín

Redacción:

Laura Fortuño

Dirección de Arte y Diseño UI:

Alessandro Marra

Desarrollo y maquetación:

Saúl Fernández

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Este contenido ha sido desarrollado por Content Factory, la unidad de contenidos de marca de Vocento, con ESTRELLA GALICIA. En su elaboración no ha intervenido la redacción de este medio.

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