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La ingeniera española que ha creado el primer exoesqueleto infantil del mundo

Elena García Armada, investigadora en robótica del CSIC que ha liderado un proyecto con sello español para ayudar a caminar a menores con tetraplejia, dice que «hay mucho por hacer» y «hay muchas posibilidades para mejorar la calidad de vida de las personas». Esta científica comparte en ‘Mucho por Hacer’, el programa de CaixaBank destinado a fomentar la educación financiera, cómo, con esfuerzo y tesón

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J.M.Sánchez

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Ha obtenido premios e importantes reconocimientos a lo largo de su carrera, pero lo que más ilusión le hace, con creces, es la sonrisa de un niño. «Cuando se ven caminando lo llena todo, nos llena de motivación y orgullo, y sobre todo, nos da alas para seguir trabajando». Son palabras de Elena García Armada, investigadora en robótica del CSIC, que ha liderado el primer exoesqueleto pediátrico para ayudar a caminar a menores con tetraplejia. Una iniciativa con la que pretende dar a estos menores afectados por problemas de movilidad la posibilidad de jugar y caminar como hacen los demás.

Pero alcanzar esta meta no ha sido fácil. Requiere de trabajo y mucha constancia. Sin embargo, cuando se consigue, el esfuerzo ha valido la pena, sobre todo, cuando supone mejorar la vida de los demás. Con su pasión y su entrega, García Armada ha logrado un descubrimiento que puede cambiar la vida de muchas personas: crear un robot que se acopla al cuerpo de una persona afectada por un problema de movilidad. «Al niño le falta fuerza para poder ponerse de pie y caminar; el robot tiene esa capacidad, esa fuerza, esa precisión y los dos juntos consiguen que el niño pueda caminar», explica la investigadora en una entrevista que forma parte de Mucho por Hacer, el programa de cultura financiera de CaixaBank orientado a aumentar el conocimiento de la población en términos básicos de finanzas personales.

Ver vídeo aquí en el que Elena García Armada relata su experiencia como ingeniera del CSIC

«Es mi trabajo y mi pasión», dice García Armada, considerada una de las diez mejores científicas de España. Pero hasta llegar a donde ha llegado ha tenido que dedicarse en cuerpo y alma a esta profesión, que le ha traído muchas alegrías. Una de ellas tiene nombre propio, Daniela. Una pequeña que ha podido mejorar sus capacidades físicas y que fue uno de los motivos por el que esta ingeniera ayudó a cambiar la dinámica de trabajo del departamento de robótica en el que trabajaba. Los padres de la pequeña visitaron sus instalaciones y le pidieron ayuda para adaptar sus avances en el campo médico. Para ello, los investigadores del CSIC aprovecharon el amplio conocimiento en robótica industrial para desarrollar un equipamiento orientado a rehabilitación. «Cambiamos muy rápidamente nuestro foco de la industria a la salud y empezamos un proyecto para desarrollar ese primer exoesqueleto pediátrico», recuerda.

«Por encima de todo para las chicas es importante encontrar referentes de carne y hueso, contemporáneos, que sean como las personas de su entorno»

Este proyecto ha permitido que muchos niños puedan mejorar su calidad de vida. «Cuando les damos la posibilidad de jugar como juegan otros niños, algo que siempre soñaron pero que quizá nunca pensaron que iba a llegar a suceder, como coger un balón o encestar en una canasta, les hace sentir como superhéroes. Es tener superpoderes para ellos, algo que nunca pensaron que podrían llegar a tener», reconoce.

Esta ingeniera hizo sus primeros pinitos en casa cuando era niña y a pequeña escala. Se sentía interesada por desmontar los objetos electrónicos y juguetes, aunque «siempre con un fin reparador». Cuando creció era, de hecho, la «manitas» en casa. “Me gustaba mucho desmontar (los objetos) para entender cómo funcionaban«. Algo que le venía de casta puesto que su madre, además, se dedicaba a la ciencia. En aquella época algo extraño todavía en el caso de una mujer, pero en los últimos años el interés de las jóvenes por el mundo científico y los llamados estudios STEM ha crecido exponencialmente, aunque todavía queda mucho camino por recorrer.

Para mejorar la situación -insiste- es necesario tener referentes femeninos. Lograrlo no es tarea fácil, pero la receta de Elena García Armada es «trabajar en muchos ámbitos», así como «reescribir las páginas de la historia porque hay muchas mujeres que han contribuido al avance y que no aparecen en los libros. Y añade: «Por encima de todo para las chicas es importante encontrar referentes de carne y hueso, contemporáneos, que sean como las personas de su entorno, como su madre, para que vean que ser científico no es ser un bicho raro». También considera que es necesario reenfocar la educación actual, así como animar a las niñas desde la más temprana edad a entender cuál es su vocación y encaminarse hacia ella.

La tecnología es un campo muy amplio que ha mejorado el ámbito médico. «Estamos en la punta del iceberg. Hay mucho por hacer, tenemos muchas posibilidades para mejorar la calidad de vida de las personas. Esa tecnología tiene que ir enfocada, no a crear superhumanos por el simple hecho de crear capacidades extrahumanas, sino que lo importante es poder completar esas capacidades que se han perdido para que las personas que han perdido una cierta calidad de vida la puedan recuperar». «Mi sueño es seguir creando esas sonrisas en niños y en mayores».

Mejorar nuestro bienestar financiero

Ese tesón de Elena García Armada también es importante a la hora de mejorar nuestro día a día. Por eso, de la mano del profesor de Economía y Empresa de la Universitat Pompeu Fabra Barcelona School of Management, Xavier Puig, descubriremos algunas claves en Mucho por Hacer. que debemos tener en cuenta para mejorar, también, nuestras finanzas personales y tratar de alcanzar así nuestro bienestar financiero. Ver vídeo aquí.

Una manera de vivir más tranquilo es tener nuestras finanzas bajo control y tomar decisiones sobre ellas con seguridad. Entre las claves para mejorar el bienestar financiero se encuentra marcarse objetivos financieros. «Cada uno tenemos los nuestros. A partir de ahí debemos tener un control de lo que ingresamos, de lo que gastamos y de cuánto ahorramos», nos cuenta Puig.

«La mejor herramienta para llevar ese control es el presupuesto. Es como un timón que nos permitirá marcar el rumbo hacia nuestros objetivos»

La mejor herramienta para llevar ese control es el presupuesto. «Es como un timón que nos permitirá marcar el rumbo hacia nuestros objetivos». A su juicio, hacer un presupuesto y ser riguroso en su control nos ayudará a ver si se está llegando a las metas marcadas o, si por el contrario, hay algún aspecto que mejorar.

Tener un control presupuestario puede mejorar la capacidad de ahorro de los ciudadanos. «Contar con un cierto ahorro puede hacernos estar más tranquilo», apunta Puig, quien destaca la necesidad de crear un «fondo de emergencia». Se trata de una cantidad de dinero ahorrado del que se pueda disponer con inmediatez y que permite cubrir imprevistos. Una opción complementaria es contratar un seguro, ya que cubren ante posibles riesgos.

Junto al programa Mucho por Hacer, CaixaBank ha creado un “hub”, ubicado dentro del portal global de cultura financiera de la entidad, denominado CaixaBank Life, a través del cual difunde periódicamente conceptos financieros básicos ligados a los proyectos vitales más frecuentes de la población. El objetivo es ilustrar la importancia de la cultura financiera a través de personas influyentes y con historias reales.

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Este contenido ha sido desarrollado por Content Factory, la unidad de contenidos de marca de Vocento, con CaixaBank. En su elaboración no ha intervenido la redacción de este medio.