El 5G es Telefónica: bienvenidos a la era del milisegundo que lo cambia todo
La operadora de telecomunicaciones enciende su 5G con el compromiso de llevarlo al 75% de la población española antes de finalice 2020

Un milisegundo. No, no lo piense demasiado. Es una medida que se escapa a nuestras capacidades; ningún ser humano tiene unos ojos y unos reflejos tan rápidos como para reaccionar en un milisegundo, como para desagregarlo de otro milisegundo. Está ahí, dentro de nuestros días, nuestras horas, nuestros minutos y nuestros segundos, pero no podemos hacer nada en esa fracción tan próxima y tan ajena a la vez.
Hasta ahora. Porque en adelante sí seremos más capaces de entender y descifrar de lo que es capaz un milisegundo. Telefónica ha encendido esta semana su 5G y con esta histórica decisión alumbra la era del milisegundo que lo cambia todo. Sí, todo. Porque todo es lo que está en juego en un milisegundo cuando se trata de la conducción autónoma o una operación quirúrgica en remoto. Ambas necesitan el tiempo real y justo eso, permitir que el tiempo real sea real, es lo que hará posible el 5G.
Esta mínima latencia, ese milisegundo que transcurrirá entre la petición y la recepción de la información gracias a la tecnología 5G, figura entre los principales atributos de esta nueva tecnología. Otro es su velocidad. Si su antecesor, el 4G, nació con una rapidez de 100 megabits por segundo (MBps) y luego fue desarrollándose en sus posteriores y mejoradas versiones hasta los 1.000 MBps, el 5G alcanzará los 10.000 MBps o 10 gigabits por segundo (GBps). Con estos parámetros, descargar una película en un puñado de segundos pasará a ser la norma.
MÁS QUE UNA NUEVA GENERACIÓN
Tan veloz y tan poco latente, el 5G también consagra la era de la hiperconectividad. Con la quinta generación de tecnologías de la telefonía móvil, el Internet de las Cosas (IoT) mostrará todo su esplendor. Miles de millones de dispositivos quedarán conectados entre sí y con nosotros. Lo notaremos en casa, con un uso más eficaz, concreto y eficiente de nuestros electrodomésticos; lo sentiremos en las empresas, equipadas en adelante con una tecnología capaz de mejorar sus modelos productivos y de sacar el máximo partido a los servicios en la nube (‘cloud’), la robotización o la inteligencia artificial; y lo aprovecharemos en las ciudades, que ya sí podrán ser todo lo inteligentes y sostenibles que deseen.
Por todo ello, el 5G es más, mucho más, que esa quinta generación de telefonía móvil. En realidad, constituye una palanca con la suficiente potencia y la suficiente fuerza como para alimentar la Cuarta Revolución Industrial. “El 5G no es sólo una nueva generación de telefonía móvil. Es una revolución por sus aplicaciones prácticas para todos los sectores y porque permite ampliar la cobertura de ultra banda ancha en las zonas rurales y en la España vaciada. Con el 5G llegan multitud de beneficios transversales para sectores como el turismo, la energía, la automoción o la salud”, destaca el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete.
Telefónica enciende ahora su 5G para demostrar la ambición con la que afronta las oportunidades que traerá esa Cuarta Revolución. Si con el despliegue de su red de fibra óptica, la mayor de Europa, ya se había situado en la vanguardia, con el lanzamiento del 5G consolidará su liderazgo digital. “Nuestra red siempre ha sido un activo diferencial. Por ella transcurre la vida de las personas y ha demostrado una fortaleza inigualable cuando más se la ha necesitado. España ya lidera las infraestructuras digitales de Europa, con la red más extensa de fibra óptica, y no ha sido por casualidad, sino por decisión y por inversión. Ahora vamos a trasladar esa historia de éxito al 5G, con el despliegue más ambicioso de la Unión Europea”, expone el presidente de la compañía.
MOTOR DE PROGRESO
Lo hace, además, en un momento clave para España. El compromiso anunciado por Telefónica consiste en que su red 5G llegue al 75% de la población, en todas las comunidades autónomas, antes de fin de año. De este modo, España contará con esta palanca dentro de la transformación digital que pretende llevar a cabo para superar los efectos económicos y sociales de la pandemia.
“El 5G supone un salto de nivel hacia la hiperconectividad, que cambiará el futuro de nuestro país”
José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica
Si durante los meses más duros Telefónica se volcó en garantizar las telecomunicaciones y la conectividad para suavizar en lo posible los impactos del confinamiento, ahora, en la hora de la reconstrucción, se pone de nuevo al servicio de la sociedad española en su propósito de desarrollar su digitalización para no quedarse fuera, precisamente, de esa Cuarta Revolución. “El 5G supone un salto de nivel hacia la hiperconectividad, que cambiará el futuro de nuestro país. Telefónica vuelve a demostrar que es y será parte de la solución y motor de progreso económico y social de España”, constata Álvarez-Pallete.
Un progreso que se expresará en milisegundos. Unos milisegundos que, en realidad, no son sólo las milésimas fracciones de un segundo, sino toda una filosofía, una auténtica declaración de intenciones. Como expone el máximo ejecutivo de la operadora, “un milisegundo es mucho más que un nuevo tiempo de respuesta, es la respuesta de Telefónica a los nuevos tiempos. Es el compromiso de Telefónica con el futuro del país”. Y ese compromiso ya está aquí. Bienvenidos al 5G de Telefónica.