GuÃa para encontrar el colchón perfecto
Antes de nada, debes saber que no existe un colchón bueno o uno malo sino uno que, por sus caracterÃsticas, se adapta mejor a ti que los demás. Y ese, es el colchón perfecto.

En España, cambiamos de colchón aproximadamente cada 9 años y cuando lo hacemos, dedicamos entre uno y dos meses para comprarlo. Este dato refleja la importancia que tiene en nuestras vidas este elemento y por esta razón, debes conocer todas las variedades de colchones que existen para saber qué aporta cada una a tu salud según tu constitución, tus hábitos y tus necesidades.
Normas para elegir el colchón perfecto
1 Pruébalo Es la regla número uno. Merece la pena que dediques tiempo y atención a probar el colchón en el que vas a dormir en los próximos años. Es uno de los protagonistas de tu descanso, y con ello, de tu salud. Cuando lo pruebes, ten en cuenta: La firmeza es uno de los factores claves que debes contemplar al probar el colchón. Desde IKEA, insisten desde hace años en aclarar el concepto de firmeza de un colchón: un colchón blando puede ser firme. Lo importante no es que la superficie sea dura, sino que sea estable, fuerte y que no se mueva cuando no debe. Al tumbarte sobre él, debes fijarte en que el colchón respete la curvatura natural de tu columna vertebral. El colchón no debe ser ni tan rÃgido como para que la superficie no se adapte a tu cuerpo, ni tan blando como para que tu cuerpo se hunda en él. Esta es la firmeza perfecta para ti. Cuando lo pruebes, hazlo con dedicación. No basta con sentarte y palparlo sino que también debes tumbarte y probar distintas posturas. Por si con la prueba en la tienda no tienes suficiente y necesitas dormir en el colchón para saber si has tomado la decisión correcta, IKEA te brinda la oportunidad de probarlo en casa, y si no te convence, tienes 365 dÃas para cambiarlo. Es su forma de expresar la seguridad que tienen en la calidad de sus modelos y en la importancia de que los pruebes hasta dar con el colchón que más va a aportar a tu descanso.

2 Piensa en tus hábitos y en tus necesidades. Entre los modelos de colchones, debes buscar el que, por su material y estructura, cumpla las condiciones que mejor se adapten a ti. Temperatura. Por ejemplo, si eres una persona con tendencia a tener frÃo, o vives en una ciudad con bajas temperaturas, te viene bien saber que la espuma viscoelástica es un material con capacidad para adaptarse a tu temperatura corporal. En cambio, si eres calurosa, un modelo de colchón con muelles puede ser tu mejor aliado en las noches de verano porque favorece la ventilación. Movimiento. Este factor se vuelve especialmente importante si vives en pareja. Si uno de los dos se mueve mucho por la noche, puede alterar seriamente el descanso del otro. En este caso, los colchones de látex son una buena opción porque absorben más fácilmente los movimientos corporales. Otra posibilidad para lidiar con estas diferencias es comprar dos colchones y unificarlos. AsÃ, cada uno duerme en la superficie que mejor responde a sus hábitos. Lesiones musculares. Nuestro modo de vida hace que este problema sea cada vez más común. Por esta razón, un buen descanso es vital para que estas lesiones no vayan a más. Los colchones fabricados con material viscoelástico tienen la virtud de aliviar las presiones musculares porque se adaptan mejor a nuestro cuerpo y a nuestros movimientos, distribuyendo el peso de manera uniforme.
3 Contempla tu peso y tu estatura. Debes saber que el largo del colchón debe superar a tu altura en 15 centÃmetros. De esta forma, tu cuerpo cabe sin problemas y tienes un espacio de margen para moverte con libertad. En cuanto al peso, es importante porque influye en la firmeza que busques en un colchón. Si pesas menos de 70kg, es recomendable que elijas un colchón de firmeza media. En cambio, si tu peso es superior, es mejor que sea un colchón de firmeza más alta. En IKEA, vas a poder encontrar colchones con medidas y firmezas para todas las constituciones porque desde hace años, incluyen en todo su surtido de colchones tanto las medidas españolas como las europeas. AsÃ, es más fácil hallar el colchón perfecto para ti.